Porque el mundo enfrenta una nueva ola de la pandemia de COVID-19 y al parecer está provocando más estragos
Las autoridades francesas anunciaron el jueves un toque de queda aún más estricto a nivel nacional que entrará en vigor el sábado a las 6:00 de la tarde y se mantendrá por al menos 15 días, una medida que pretende frenar la propagación del coronavirus.
El primer ministro de Francia, Jean Castex, también anunció nuevos controles para quienes llegan al país provenientes de países que no forman parte de la Unión Europea. A partir del lunes, esos viajeros deberán mostrar una prueba PCR con resultado negativo y cumplir una cuarentena de siete días antes de realizarse otra prueba diagnóstica para COVID-19.
Francia pretende coordinar con la Unión Europea una serie de normas para personas que llegan de otros países de la UE, dijo Castex. El gobierno francés trata de evitar un tercer cierre con la implementación de medidas parciales, como toques de queda, que el primer ministro llamó tanto “preventivas” como “reactivas”.
La mayoría de las regiones se encontraban bajo un toque de queda a partir de las 8:00 de la noche, pero ahora “todos deben estar en sus hogares a las 6:00 de la tarde”, detalló Castex. Eso significa que las tiendas deberán estar cerradas para entonces. Bares y restaurantes han estado cerrados por meses.
El índice promedio de contagios de coronavirus se mantiene en aproximadamente 16.000 personas por día. Francia tiene uno de los totales de decesos más altos de Europa, con más de 69.000, y se ubica en séptimo lugar a nivel mundial.