A dos meses de que un incendio en una estación migratoria de Ciudad Juárez, Chihuahua, dejara decenas de migrantes fallecidos y muertos, el presidente Andrés Manuel López Obrador habló sobre las acciones que tomará ante información sobre el suceso que ha sido clasificada como "confidencial".
Con la frase "el que nada debe, nada teme", se refirió en específico a videos de la estación del Instituto nacional de Migración (INM), donde ocurrieron los hechos. Explicó por qué se reservaron, pero adelantó que hoy serán difundidos.
"No sé por qué lo hicieron [reservar los datos], voy a preguntar para que se permita toda la información (...) a veces los abogados lo hacen por el debido proceso, pero en estos casos, que además de ser trágicos y dolorosos, son usados por nuestros adversarios para golpearnos, responsabilizarnos y acusarnos, es mejor mostrar todo", dijo.
A la par, el presidente habló sobre el avance del caso y destacó que se sigue haciendo la investigación y ya hay detenidos. Aunque dijo desconocer el número exacto de señalados, destacó que hay personas que están siendo procesadas, incluso funcionarios.
El lunes 27 de marzo, al rededor de las 20:30 horas, extranjeros retenidos en el centro migratorio de Ciudad Juárez comenzaron a apilar colchonetas y luego les prendieron fuego como protesta ante el temor de ser deportados.
A las fueras de la estación migratoria el movimiento fue poco hasta que las llamas se volvieron incontrolables, luego vinieron las imágenes de terror, de cuerpos rescatados y calcinados, tendidos sobre la calle.
Aunque al principio las especulaciones fueron varias, y la información oficial hermética, poco a poco se fueron revelando más videos y fotografías, capturadas desde dentro de la estación migratoria, que dieron cuenta de que la tragedia se pudo evitar, pues cuando el siniestro inició, los extranjeros fueron ignorados y se quedaron encerrados dentro de una especie de celda, donde los mantenían retenidos.