Durante la primera quincena de enero, la inflación general se aceleró y se ubicó en 4.90% anual, desde 4.86% de la segunda quincena de diciembre, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Greografía (Inegi).
Con este dato, la inflación ligó cinco quincenas acelerándose y estuvo por encima de lo estimado por el consenso del mercado que pronosticó una tasa de 4.78% anual, según la encuesta más reciente de Citibanamex.
En su comparación quincenal, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un avance de 0.49%, desde el 0.48% del cierre del año pasado.
A lo largo del año los riesgos sobre la inflación están sesgados al alza, lo que provocaría una lenta trayectoria a la baja en la inflación y desde Pantheon Macroeconomics destacaron que el incremento de inicio del año fue por la parte no subyacente.
“Nuestro escenario base es que la inflación seguirá cayendo gradualmente este año, particularmente durante el segundo semestre, pero los riesgos siguen sesgados al alza, debido principalmente a las malas condiciones climáticas. También seguimos de cerca el efecto del salario mínimo”, dijo Andrés Abadia de Pantheon Macroeconomics.
Inlfación subyacente a la baja
Al interior de la inflación, la subyacente se ubicó en 4.78% anual en la primera mitad de enero, desde el 4.98 por ciento de la segunda quincena de diciembre del año pasado. Con este dato ligó 23 quincenas a la baja.
El dato de la primera quincena de enero, que estuvo en línea con lo estimado por el mercado, es el más bajo desde la segunda quincena de agosto del 2021.
Las mercancías, que han mostrado una mayor moderación de las presiones, anotaron una inflación anual de 4.45%, con lo que sumó tres periodos a la baja.
Al tiempo que los servicios tuvieron una inflación de 5.19% anual, su segunda quincena moderándose.
En cuanto a la no subyacente y que presionó al INPC a finales del año pasado, la inflación anual en la primera quincena de enero fue de 5.24%, desde 4.49% del periodo inmediato anterior.
En el desglose, los productos agropecuarios fueron los que ejercieron mayor presión, pues tuvieron una inflación de 9.73% anual, desde el 7.52% del cierre de diciembre y los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno de 1.41% anual, desde el 1.91%.