Tan polémicos como necesarios, los acuerdos políticos son el pan de cada día en ese ámbito y, por supuesto, de cada elección, no obstante, hay una pregunta en el aire... ¿Qué tanto benefician a los partidos cuándo estos se conocen públicamente?
La pregunta surge, luego de que de forma reciente generó gran polémica la publicación de acuerdos de este tipo entre los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN), que fueron firmados durante las elecciones del año pasado en Coahuila, entidad donde resultó ganador el hoy gobernador aliancista Manolo Jiménez (PAN, PRI, PRD).
Tras conocerse que el PAN exigió hasta notarías públicas a cambio de ceder y dejar como abanderado a Manolo Jiménez, emanado del PRI, la polémica se levantó, sobre todo entre el grupo en el poder, encabezado por Morena y los partidos Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT), que dijeron que la 'derecha' sólo busca ver beneficiados intereses personales.
Incluso, el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó como un "descaro" la publicación de dichos acuerdos políticos, por parte del líder nacional panista, Marko Cortés.
"Lo fantástico o surrealista o descarado es que el mismo presidente del PAN lo da a conocer (..,) si no la gente que es muy buena, no alcanzaría a entender como se dan estos enjuagues, esta repartición del motín", dijo.
¿Pero qué otras ocasiones han salido mal los acuerdos políticos de este tipo? En Nación321 te contamos algunos casos.
La reciente polémica, que se originó cuando Marko Cortés reclamó falta de cumplimiento a los acuerdos hechos en 2023, por parte de Manolo Salinas, se salieron de control, pues el líder panista expuso el documento íntegro que daba cuenta de sus peticiones.
Para muchos exageradas y ávidas de poder, dichas peticiones incluían candidatos panistas en algunos distritos electorales para los comicios de ese año, así como secretarías y subsecretarías en caso del triunfo de Manolo Salinas.
Y aunque hasta ahí todo 'ok', más de una ceja se levantó cuando la lista sumó "20% de los registros civiles y oficinas de recaudación", "20% de las direcciones de planteles educativos y universidades, "6 notarías" y la ratificación de un magistrado.
Eso no fue todo, ante los reclamos del líder panista, Manolo Salinas, respaldado por el líder del PRI, Alejandro 'Alito' Moreno, salió a explicar que dicho acuerdo sólo se cumpliría si el PAN aportaba 20% de votos a su favor en 2023. Y al final, para las elecciones de este año, ambos partidos rompieron en lo local con cualquier tipo de alianza.
¡Qué tal!
En abril de 2022, senadores opositores del PAN, PRI, Movimiento Ciudadano (MC) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se reunieron con el fin de discutir su postura frente a la Reforma Eléctrica, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, así como Morena y sus aliados.
Convencidos de que votarían en contra, acordaron aliarse para esa y otras reformas impulsadas por Morena y se autonombraron “el bloque de contención”, con el objetivo de intentar detener a la mayoría morenista.
El acuerdo fue sumar votos en contra de mociones polémicas del Presidente y algunas reformas trascendentales impulsadas por Morena, siempre y cuando se respetara la ideología de cada partido.
Luego de algunas tensiones entre este grupo, “el bloque de contención” se fracturó a finales del año pasado, cuando buscando impulsar al gobernador de Nuevo León, Samuel García, como su precandidato presidencia, los emecistas se vieron frustrados por los diputados locales del PRI y PAN en NL.
La amistad duró lo que una aspiración presidencial.
En diciembre de 2012, el expresidente Enrique Peña Nieto y las entonces tres principales fuerzas políticas del país se suscribieron en el 'Pacto por México', para avalar una serie de reformas a las telecomunicaciones, educación y una ley de responsabilidad hacendaria.
Arropado por el PAN, PRI y PRD, Peña Nieto aseveró que ese pacto se firmaba con la convicción de transformar el país "en una nueva etapa de su vida democrática".
No obstante, en los partidos, dicha decisión de alianza fue crucial en años futuros.
Un ejemplo fue el PRD donde, tras ser criticado por sus primeros 'guiños' con la derecha, el hasta hoy líder perredista, Jesús Zambrano, consideró que el bien del país estaba por en cima de las críticas, pero las cuentas las pagó en las urnas.
En la elección presidencial de 2012, el 'sol azteca' logró por sí solo más de 10 millones de votos, con Andrés Manuel López Obrador como su candidato, pero para 2018 a penas consiguió 1 millón 307 mil, abanderando a Ricardo Anaya, en alianza con el PAN y MC.