¡Cumplió su palabra!
Desde hace meses, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que en febrero de este año enviaría un paquete de reformas con las que pretende reforzar la autodenominada política de la Cuarta Transformación.
Finalmente, el pasado lunes 5 de febrero, el mandatario envió un paquete de 20 reformas constitucionales que rápidamente provocaron reacciones.
Si bien las 20 propuestas de reformas causaron ruido, una de las más sonadas entre opositores y simpatizantes de la 4T es la que tiene que ver con la modificación al sistema de pensiones para trabajadores del Estado.
¿DE QUÉ VA ESTA INICIATIVA?
Alineado a su política de atención a la población, el Presidente indicó que su reforma tiene que ver con el mejoramiento de la calidad de vida de los trabajadores de los empleados, algo que, según sus palabras, se mermó en gobiernos "neoliberales", aludiendo a las modificaciones en este tema que se realizaron en 1997 y 2007.
La iniciativa pretende modificar la Constitución para garantizar una "jubilación digna" para quienes trabajen para el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como para el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para Trabajadores del Estado (ISSSTE). ¿Cómo lo logrará? Con una reforma para que este sector reciba sueldo completo luego de jubilarse, a diferencia de una pensión de apenas el 50% del salario base como sucede al día de hoy.
La propuesta "propone revertir las reformas de pensiones, tanto la aprobada durante el gobierno de Ernesto Zedillo, en 1997, como la impuesta en 2007, por Felipe Calderón, porque afectan injustamente a trabajadores del IMSS y del ISSSTE, pues les impiden jubilarse con el 100% de su salario", destacó el mandatario al presentar su iniciativa.
¿ES VIABLE ESTA IDEA?
La pregunta es respondida por el maestro José Luis Vásquez Costa, académico de la Universidad Iberoamericana (Ibero), quien afirma que una reforma de esta naturaleza debe considerar un esquema "perfectamente armado, instrumentado, transparente y viable, de lo contrario, podría afectar la estructura económica del país y sería un costo político para quien llegue a la Presidencia.
"¿Cuál es el compromiso que está haciendo el presidente con el pueblo? Tu pensión te da 16 mil pesos, yo te doy los 4 mil restantes de salario promedio de 20 mil pesos. Debemos revisar el Presupuesto y la Ley de Ingresos de este año", detalló.
Además, advirtió que no es un tema 'fácil', pues la propuesta tiene que estar acompañada de una buena planeación, ya que "si se pretende continuar con la política de aumentar el salario mínimo a los trabajadores, por ende, se modificará el salario diario integrado, lo que elevará las cuotas de retiro".
Por su parte, el profesor José Ignacio Martínez Cortés, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN) de la UNAM, indicó que la propuesta es viable... en caso de que esté acompañada de una reforma fiscal.
En entrevista con Nación321, el académico indicó que las reformas que presentó el Presidente se podrían financiar con una reforma fiscal que aumente la recaudación y, con ello, se puedan fondear las pensiones, sin necesidad de aumentar impuestos.
El profesor indicó que la idea de aumentar persones es válida si se crea una reforma fiscal que combata problemáticas como la elusión, evasión, subvaloración, subvaluación, distorsión, dominancia, predominancia y se se genere la revisión de subsidios e incentivos a grandes contribuyentes.
Según sus cálculos, "aumentar la base tributaria" generaría al Estado "un ingreso tributario del orden del 10.3% del PIB, que estamos hablando de alrededor de 2.7 billones de pesos", con lo que bien se podría fondear la propuesta del jefe del Ejecutivo federal.
Sobre el tema, el especialista destacó que la tarea será un pendiente de quien encabece la próxima administración federal: "Esta reforma fiscal bien podría realizarse, impulsarse en 2025. Es algo que la nueva presidenta o el nuevo presidente podría impulsar en su primera legislatura".
UNA PROPUESTA CON TINTE ELECTORAL
El académico de la Ibero cuestionó que esta reforma llegue en un momento en el que el país cruza por un proceso electoral: "Antes de elecciones quieres modificar la ley para buscar que todos los trabajadores en México tengan una pensión digna y alcancen el 100% mediante el subsidio del gobierno, y que los patrones siguen pagando lo mismo, suena a politización y a una búsqueda de ganancia de votos”, consideró.
En tanto, Martínez Cortés afirmó que la iniciativa enviada tiene "totalmente un tinte electoral", pues son "tiempos de campañas para todos partidos, para las candidatas, el candidato, lo que refleja una enorme oportunidad hacia el electorado".
Si bien ve que la reforma a las pensiones navega con una bandera política para el Presidente y su partido, el experto resaltó que desde la oposición, tanto el PRI como el PAN, se metieron a 'jugar ajedrez' con López Obrador.
"Algo que es relevante es que no solamente es el Presidente (aborda el tema) sino que también el PRI y el PAN dicen acompañar" esta propuesta. Aunque eso sí, dijo, habrá que ver cómo se maneja el asunto desde el Poder legislativo.