Porque el Banco Mundial calcula que la corrupción nos cuesta 9% del PIB cada año.
La corrupción es un problema que le cuesta a México 890 mil millones de pesos cada año, según el Instituto Mexicano para la Competitividad.
Por ello, y para mejorar la productividad del país, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) realizó un estudio para acabar con este mal.
La investigación "Adoptando una política firme contra la corrupción" hace varias recomendaciones y aquí te presentamos 6 propuestas clave:
1- Incorporar políticas anticorrupción a estrategias clave
El combate a la corrupción no es sólo en la burocracia o trámites. El estudio recomienda que las políticas anticorrupción sean integradas a los grandes programas de gobierno como en educación y seguridad.
Además, recomienda que cada programa de gobierno tenga un pilar anticorrupción para prevenir esta práctica en cada escenario particular.
2- Combatir la corrupción en puestos específicos
Cada cargo o rol de trabajo tiene retos particulares y los riesgos de corrupción que enfrenta un comprador o un director de tecnología no son los mismos.
Por ello, los "códigos de conducta especializados para funcionarios en contratación pública" son un paso necesario en la erradicación de este problema, dice la OCDE.
3- Personal permanente y orientado a la prevención
Los Comités de Ética deben dejar las funciones sancionadoras y enfocarse en ser promotores de una cultura de integridad en el servicio público.
Las actividades de sanción deben permanecer en manos de las Unidades de Responsabilidad de los órganos de control interno; es decir, en la Contraloría.
4- Políticas claras para la gestión de situaciones de conflicto de interés
El conflicto de interés, por sí mismo, no es corrupción, aunque sí es una situación que puede conducir a un mayor riesgo.
Por ello, estas situaciones deben de ser identificadas y manejadas adecuadamente para procurar la integridad en el sector público y defender el interés público.
5- Proteger a quienes denuncian actos ilícitos
Usualmente, quienes denuncian irregularidades tienen que enfrentar intimidación, acoso, despido y violencia por parte de funcionarios, compañeros de trabajo o superiores.
La OCDE recomienda que se deben crear campañas de concientización que hagan énfasis en la obligación de denunciar y crear un ambiente donde sean protegidos los denunciantes, ya que esta es la primera línea de batalla para identificar problemas de dilemas éticos, conflicto de interés o actos de corrupción.
6- Facilitar las investigaciones administrativas disciplinarias
El combate a la corrupción debe ser un esfuerzo colectivo dónde los organismos de control interno, la Secretaría de la Función Pública y las autoridades correspondientes tengan la coordinación correcta para combatir este problema como un frente común y no existan barreras para cumplir el trabajo de cada unidad.
Actualmente, la OCDE se encuentra trabajando con algunos gobiernos locales (Coahuila, Ciudad de México y Nuevo León) para apoyar en la implementación de Sistemas Estatales Anticorrupción.