Porque este empresario está en la mira de las autoridades mexicanas... otra vez
Hace un par de años, el 3 de junio de 2003, un nuevo medio de comunicación salía a la luz: El Independiente, comandado editorialmente por Raymundo Riva Palacio y Javier Solórzano, el nuevo diario prometía ser una bocanda de aire fresco para nuevos talentos.
Sin embargo, la aventura duraría poco menos de un año debido a los escándalos en los que se vería involucrado su dueño: el empresario argentino Carlos Ahumada.
Así es, el dueño de grupo Quart y de los equipos de futbol León y Santos Laguna incursionó en el negocio de los medios de comunicación, pero no le fue nada bien.
De acuerdo con diversas columnas en ese entonces se sabía muy poco del empresario, incluso quien le vendió la maquinaria y el local para la impresión de El Independiente fue el grupo Cantón, cuyos dueños son los hermanos Cantón Zetina y que actualmente tienen marcas como diario Basta y distintas ediciones de los diarios Hoy.
Raymundo Riva Palacio narra en su libro La prensa de los jardines, su breve etapa como director de El Independiente. En el documento explica que desde la primera semana que vio la luz, existieron problemas.
Uno de ellos fue que la reportera Andrea Merlos, cuya fuente de cobertura era el PRD, criticó al partido y de inmediato Ahumada pidió que se despidiera, supuestamente por presiones de Rosario Robles.
Sin embargo, se llegó a un acuerdo para que Merlos fuera designada a otra fuente y ahí quedó sanjado el primer conflicto.
Otro de los problemas a los que se enfrentó el grupo de periodistas de ese medio fue el retraso de sus salarios.
"No había terminado el primer mes cuando los salarios se retrasaron dos días. La redacción, compuesta por profesionales que habían trabajado con profesionales de los medios, se molestó. Unos 80 de ellos firmaron una carta de protesta dirigida a la administradora, Lidia Uribe, de quien después descubriríamos su grado íntimo de relación empresarial con Ahumada”, se lee en el capítulo del libro bajo el título: El Independiente, crónica de una tormenta.
El retraso no pasó a mayores, pero tanto Riva Palacio como Solórzano estaban viendo las dificultades que tenía el diario.
Otro punto que los hizo ver su suerte fueron los conflictos que Ahumada comenzó a tener en el campo deportivo pues el empresario tenía fama de sabotear a sus rivales para obtener ventajas.
"Lo acusaron sus competidores de poner micrófonos en el vestidor para saber cuáles eran las instrucciones de juego, de pintarlos para que el olor fresco de los ácidos les afectara el rendimiento, y hasta de evitar, con música y zafarranchos en el hotel donde se hospedaban los visitantes, que pudieran descansar", escribió Riva Palacio en su libro.
Esta situación provocó que Ahumada insinuara a los directores del diario que estaba dispuesto a venderlo y dejarlo en sus manos, pues quería atender sus asuntos con los equipos de futbol y otros problemas que tenían el empresario.
Sin embargo, la bomba explotó cuando el periodista Víctor Trujillo Brozo difundió un video en donde se observa a Ahumada entregar fajos y fajos de billetes a René Bejarano, entonces secretario particular de López Obrador, jefe de Gobierno capitalino.
Bejarano aceptó haber recibido el dinero y señaló que iría para campañas del PRD y Rosario Robles fue señalada como la persona que introdujo a Ahumada al círculo del sol azteca.
Con ese escándalo a cuestas, el equipo editorial de El Independiente exigió al empresario su deslinde del diario. Ahumada se comprometió a vender el diario, pero no a deslindarse públicamente del mismo por lo que el equipo de directores, editores, reporteros y redactores presentaron su renuncia a través de una carta colectiva.
"El equipo editorial de El Independiente decidió anoche renunciar al diario, efectivo el 15 de marzo, luego de que Carlos Ahumada Kurtz, propietario del Grupo Quart, una de cuyas empresas es el periódico, rechazó deslindarse financiera, administrativa y periodísticamente del medio”.
Este fue el breve paso que Carlos Ahumada tuvo por los medios de comunicación. Ahora, la Fiscalía intenta vincularlo a proceso por el delito de fraude a la hacienda pública; sin embargo, las autoridades de Argentina, donde fue detenido, desestimaron las acusaciones y el empresario recuperó su libertad.