La polémica que estalló en el Parlamento de Nueva Zelanda, cuando la diputada Hana-Rawhiti Maipi-Clarke realizó un 'haka' durante una sesión legislativa, rápidamente dio la vuelta al mundo.
Maipi-Clarke, del Partido Te Pati M?ori, sorprendió a todos al levantarse de su asiento, romper varios papeles y comenzar a ejecutar esta tradicional danza maorí, desafiando la discusión de un controvertido proyecto de ley que busca modificar un tratado firmado en 1840 entre el pueblo maorí y el gobierno de Nueva Zelanda.
Este gesto, que fue acompañado por varios otros diputados y por personas en la galería del Parlamento, fue interpretado como una protesta ante una reforma que afectaría los derechos de los maoríes, particularmente en lo que respecta al territorio y los principios del Tratado de Waitangi.
El "haka" de Maipi-Clarke no fue solo un acto simbólico de resistencia, sino también un llamado a cuestionar el trato histórico que el gobierno de Nueva Zelanda ha dispensado al pueblo maorí, que se remonta a más de dos siglos de tensiones y desigualdad. En ese contexto, el co-líder del Partido Maorí, Rawiri Waititi, explicó el propósito del "haka" como un desafío directo al gobierno.
M?ori members of New Zealand’s parliament disrupted the passage of a bill that would reinterpret the 1840 Treaty of Waitangi, which uplifts Indigenous peoples. The MPs performed a haka—a traditional M?ori dance and chant—causing the session to be suspended. pic.twitter.com/89VhB1aqAS
— red. (@redstreamnet) November 14, 2024
El "haka", que originalmente era una danza de guerra maorí, tiene un significado profundo y multifacético. En tiempos antiguos, servía como un rito de fortalecimiento para los guerreros antes de la batalla, además de ser una forma de intimidación. Hoy en día, el "haka" ha sido resignificado y se utiliza en diversas ocasiones, tanto para dar la bienvenida como para expresar protesta, como en este caso.
El momento de la protesta en el Parlamento resultó en la expulsión de Maipi-Clarke y de otros diputados que se unieron a su "haka". La sesión fue suspendida, y las sanciones fueron aplicadas, pero la tensión política y social que desató la protesta continúa.
El ministro de Justicia y defensor de la reforma, David Seymour, del Partido ACT, que forma parte de la coalición gobernante de Christopher Luxon, ha argumentado que la reinterpretación del Tratado de Waitangi es necesaria para adaptar sus principios a la realidad contemporánea.
Sin embargo, para muchos maoríes, esta modificación representa una amenaza a sus derechos históricos y culturales, lo que ha llevado a una fuerte movilización política como la que se vio en el Parlamento de Wellington.