Porque la ruptura entre AMLO y Monreal podría perjudicar al partido en 2018
"No es la lucha del poder por el poder, no es el quítate tú, porque quiero yo, no es la ambición ni el poder, ni el dinero; lo que queremos es la transformación de México".
Esta fue la frase que lanzó Andrés Manuel López Obrador durante el discurso que ofreció esta mañana en el Monumento a la Revolución con motivo de la firma del Acuerdo Político Nacional.
Y aunque esta frase podría estar dedicada a cualquiera, López Obrador la pronunció una semana después de que se dieran a conocer los resultados de una encuesta en la Ciudad de México que molestó a Ricardo Monreal, delegado de Cuauhtémoc, quien aspira a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.
El líder de Morena no se ha pronunciado oficialmente sobre la petición de Ricardo Monreal de volver a repetir la encuesta que dejó como ganadora de la coordinación de trabajos en la CDMX, y virtual candidata a la jefatura de Gobierno, Claudia Sheinbaum; sin embargo, sus palabras podrían darlos luz de cómo piensa el tabasqueño.
López Obrador aseguró que el objetivo superior de su movimiento es un cambio profundo en el país y pidió a sus nuevos adeptos que no se olviden de eso.
"Hay veces que por las circunstancias se confunden las cosas y se piensa que lo más importante son los cargos y flota la ambición y la calentura, sobre todo si se va a ser candidato a un cargo", dijo el líder de Morena.
Según López Obrador, en estos tiempos los cargos no son importantes porque simplemente son un medio y no un fin.
"Nosotros tenemos la dicha enorme de dirigir un movimiento de transformación, no dejemos pasar la oportunidad, que nos importe hacer historia, no ocupar un cargo", sostuvo.
Incluso, dijo que en caso de que su movimiento gane, habrá más oportunidades de ocupar cargos, por ejemplo en Pemex o en la Secretaría de Educación puesto que "no todos son candidaturas".
¿Será este un último llamado de López Obrador para que Monreal acepte los resultados de la encuesta y respalde a Sheinbaum?