Opinión

Juan Ignacio Zavala: La visita

El encuentro. | López Obrador y Biden sostuvieron un encuentro donde hablaron de diversos temas bilaterales | Fuente:

AMLO fue a EU. Estuvo en la Casa Blanca. Se sabe: lo suyo no es la diplomacia, el mundo, la cosa internacional no es lo de él. Le gusta su casita, su tlayuda, sus memelas y su agua de piñamiel. 

Su contacto con el mundo se limita a Silvio Rodríguez y ver el beis estadounidense de las grandes ligas. Lo demás, mejor en su rancho. Es de todos conocidos que el mal vino de afuera, que el paraíso mexicano se jodió cuando llegaron los extranjeros, concretamente los españoles. Después de eso franceses, austriacos y gringos también han participado en el saqueo y la devastación de nuestro edén. Así piensa nuestro Presidente, así lo dice, así vive y para nadie es, o debiera ser, novedad.

Así pues, que nuestro Presidente fue a la Casa Blanca por segunda ocasión. Solamente algún iluso hubiera tenido alguna alta expectativa de la reunión con Biden. Considero que la reunión ha sido exagerada por apoyadores y detractores. ¿Que no lo recibió Biden? No, pero no era el protocolo. ¿Que estuvo desgarbado? Sí, así es él siempre. ¿Que es un fachoso?, sí. ¿Que no se arregló para la ocasión?, pues no, pero nunca ha sido un GQ. ¿Que no sabe hablar inglés?, no y no es novedad. ¿Que se sentía incómodo?, por supuesto y no muchos se sienten cómodos cuando están en la Casa Blanca con el más poderoso del mundo. ¿Que se alargó en el discurso?, el Presidente no conoce la mesura para hablar, cuál es la sorpresa. ¿Que dijo barbaridades?, diario dice barbaridades. ¿Que no trajo nada?, no, pero nadie pensaba que fuera a traer algo.

Ahora bien, del otro lado cabe decir lo mismo. ¿Fue un éxito el viaje?, no, simplemente no fue un fracaso. ¿Que el Presidente llenó de alegría y de esperanza a los paisanos que viven allá?, absolutamente falso. Las visitas presidenciales –de todos– les valen madres a los paisanos, saben que no arreglan nada. ¿Que algunos lo saludaron muy efusivamente?, claro, a los mexicanos allá les da gusto ver a sus compatriotas y no reniegan de saludar a su Presidente, sea quien sea –todos tienen anécdotas al respecto–. ¿Que dio un gran discurso y puso en alto el nombre de México y restauró la dignidad pisoteada por el neoliberalismo?, ridículo. Dio un discurso de megahueva, como el 98% de los que dice, y su presencia no dignificó absolutamente nada. ¿El viaje traerá beneficios a los países?, para nada. Seguirá lo que estaba planeado y se harán algunas modificaciones necesarias y punto. Nada nuevo.

Es claro que López Obrador fue a la Casa Blanca para frenar las críticas de que trae pleito con Estados Unidos, que Biden lo odia y que los gringos se van a llevar su dinero en cualquier momento porque están muy ofendidos con las groserías que les hace en las mañaneras. Estados Unidos ha lidiado con personajes bastante más complejos que AMLO. A Biden también le convino el encuentro para que no haya mayor alboroto en lo que arregla el desbarajuste que trae y que ha provocado una enorme caída de popularidad que pone en duda su viabilidad como candidato para el año que entra.

Lo que sí demostró la gira es lo polarizado que está este país en torno a la figura presidencial. Para unos es un ejemplo de estadista internacional, hombre de mármol que se enfrenta a las potencias sin temor alguno y que conquista el respeto para los habitantes de esta patria, y para otros, un hombre cerril, ignorante, demagogo impresentable que nos está sumiendo en el caos: un peligro para México. Porque lo cierto es que desde que ganó AMLO en 2018 regresamos a 2006.

Juan Ignacio Zavala 15.15.2022 Última actualización 15 julio 2022 7:15

RELACIONADAS:

En qué se utilizarán los mil 500 mdd acordados con Biden

Biden da confianza para olvidar los modales, dice AMLO

Los acuerdos que AMLO pactó con Biden en Washington

Obama, Trump o Biden ¿Quién ha deportado más?

AMLO y Biden: 6 puntos clave sobre la reunión bilateral

Compartir:
Lo más importante
Advertising
Advertising