“¡Que viva Estados Unidos, que viva México lindo y querido!” dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador al cierre de su participación en la conversación con su homólogo estadounidense Joe Biden en la Casa Blanca.
“A usted presidente Biden le tenemos confianza porque respeta nuestra soberanía, estamos dispuestos a seguir trabajando con usted en beneficio de nuestros pueblos, cuente siempre con nuestro apoyo y solidaridad”, refirió López Obrador.
La reunión entre ambos mandatarios inició a las 10:15 horas de este martes, tiempo del centro de México y tuvo una duración aproximada de dos horas. El diálogo bilateral estuvo atravesado por temas migratorios, de seguridad y economía.
López Obrador propuso a Joe Biden un plan de cooperación entre México y Estados Unidos con estos puntos:
El presidente mexicano destacó que su gobierno ha facilitado que los estadounidenses que viven cerca de la frontera sur compren gasolina a un precio más bajo en México, y que muchos estadounidenses estaban aprovechando la proximidad.
“Mientras esperábamos que bajaran los precios, hemos permitido que los estadounidenses que viven cerca de la frontera llenen sus tanques de gasolina del lado mexicano a precios más bajos”, dijo López Obrador.
Los precios de la gasolina en EU actualmente tienen un promedio de 4.66 dólares por galón, cifra que se sitúa por debajo de un máximo de más de 5 dólares por galón el mes pasado. López Obrador ‘presumió' que la gasolina cuesta alrededor de 3.12 dólares por galón en México, en comparación, aunque el combustible está fuertemente subsidiado por el gobierno de su país.
Añadió que México también está suministrando combustible a California, Arizona y otros estados fronterizos y que planea construir plantas de licuefacción de gas natural y fábricas de fertilizantes con inversión estadounidense.
Los funcionarios de la administración de Biden dijeron a medios de comunicación, minutos antes de la reunión, que la conversación estaba diseñada para mostrar la fuerza subyacente de la relación entre Estados Unidos y México, en temas que van desde la migración hasta la trata de personas.
Los precios altísimos en las gasolineras son uno de los principales impulsores de la inflación al rojo vivo que arrastra políticamente a Biden y pone en peligro las posibilidades de su partido de mantener el control del Congreso en las elecciones de mitad de período de noviembre.
Durante un discurso de 25 minutos lleno de referencias históricas, AMLO reiteró su solicitud de que EU amplíe las visas de trabajadores para los mexicanos, diciendo que podría ayudar a abordar la escasez de mano de obra e impulsar la producción económica para permitir que EU compita mejor con China, que dijo que tiene convertirse en “la fábrica del mundo”.
Biden respondió a AMLO con un poco de jactancia propia, diciendo que Estados Unidos es la economía principal de más rápido crecimiento en el mundo y que desde que asumió el cargo, el país ha creado 8.5 millones de empleos y los salarios han aumentado.
“China no solo no va a ser la fábrica del mundo, somos la fábrica del mundo”, dijo.
El presidente expresó su deseo de reformar las leyes de inmigración de Estados Unidos, pero dijo que el tema era uno de los muchos que se han visto obstaculizados en un Congreso dividido. Biden lanzó un golpe a sus oponentes políticos nacionales, ataques que los presidentes anteriores se han mostrado reacios a hacer frente a líderes extranjeros.
“Tenemos liberales moderados y conservadores y conservadores extremos”, dijo Biden a AMLO. “Estoy esperando que el partido republicano vuelva a ser un partido tradicional”.
López Obrador inició su gira por Washington un mes después de rechazar la invitación de Biden a la Cumbre de las Américas en Los Ángeles el mes pasado. El líder mexicano y otros en América Latina objetaron la exclusión estadounidense de los líderes de Cuba, Venezuela y Nicaragua por cuestiones de democracia y derechos humanos.
El presidente mexicano también acusó a Estados Unidos de priorizar la ayuda a Ucrania sobre la asistencia a Centroamérica.
Antes de que AMLO hiciera extensos comentarios sobre la relación de México con EU y cuestionará a Biden por los precios de la gasolina, el presidente de EU dijo que los informes sobre una ruptura entre ellos estaban “sobrevalorados”.
“Tenemos una relación sólida y productiva”, dijo Biden.
Biden ha buscado restaurar los lazos entre Estados Unidos y México que se tensaron bajo el expresidente Donald Trump, quien amenazó repetidamente con aranceles y cierres de fronteras si México no hacía más para detener la migración indocumentada. La administración de Trump construyó millas de muros de bolardos de acero a lo largo de la frontera sur, una medida que fue profundamente impopular en México.
López Obrador, sin embargo, se llevaba bien personalmente con Trump y ha habido tensiones periódicas en la relación entre Estados Unidos y México bajo Biden. Los funcionarios estadounidenses han presionado a México por su política energética centrada en el estado que, según dicen, viola el acuerdo de libre comercio entre las dos naciones y Canadá.
Con información de Bloomberg