Este martes, el consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, condenó "el uso de la fuerza contra funcionarios de la Embajada" de México en Quito, Ecuador, tras la incursión de la policía ecuatoriana para detener al exvicepresidente Jorge Glas.
La condena se da después de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, criticara la posición de Estados Unidos y Canadá frente a esta crisis diplomática y echara en falta una reacción directa de su homologo estadounidense, Joe Biden.
"Condenamos esta violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, incluido el uso de la fuerza contra funcionarios de la embajada", afirmó Sullivan en conferencia de prensa.
"Hemos revisado las imágenes de las cámaras de seguridad de la Embajada de México y creemos que estas acciones han sido un error", añadió Sullivan.
El funcionario estadounidense indicó que "el gobierno ecuatoriano ignoró sus obligaciones bajo el derecho internacional como estado anfitrión de respetar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas y puso en peligro los fundamentos de las normas y relaciones diplomáticas básicas".
"Le hemos pedido a Ecuador que trabaje con México para encontrar una solución a esta disputa diplomática", insistió Sullivan, quien acogió con satisfacción las reuniones previstas en la Organización de los Estados Americanos (OEA) "para ayudar a alcanzar una solución diplomática y pacífica".
El Consejo Permanente de la OEA se reunirá dos veces esta semana para abordar la crisis diplomática: este martes por la tarde a petición de Ecuador y el miércoles por la mañana, por iniciativa de Colombia y Bolivia.