Porque se perfila una pelea por la presidencia francesa entre la derecha y la extrema derecha
El presidente socialista francés François Hollande no buscará su reelección en los comicios de mayo de 2017, informó a través de un mensaje de televisión durante este jueves.
"He decidido no ser candidato en la elección presidencial", declaró Hollande, quien es el presidente francés más impopular del último medio siglo, pues cuenta solamente 16% de opiniones favorables.
Apenas el pasado domingo 26 de noviembre, el primer ministro, Manuel Valls, declaró al semanal Le Journal du Dimanche que no descartaba competir en la elección interna del Partido Socialista.
François Hollande fue electo en 2012, al derrotar al presidente derechista Nicolás Sarkozy. Con su declinación, el socialista se convirtió en el primer jefe de Estado en renunciar a la posibilidad de un segundo mandato desde la instauración de un nuevo régimen constitucional en 1958.
LOS RIVALES PERFILADOS
El exprimer ministro François Fillon, un conservador católico que promete reformas económicas liberales, se impuso holgadamente el 27 de noviembre como el candidato de la derecha francesa, Los Republicanos, a las elecciones presidenciales de 2017.
Fillon, quien fue el primer ministro del presidente Nicolas Sarkozy entre 2007 y 2012, tiene buenas posibilidades, según las encuestas, de ganar las elecciones presidenciales del próximo año si se enfrentara contra la líder del ultraderechista Frente Nacional (FN) Marine Le Pen.
Marine Le Pen sucedió a su padre, Jean-Marie LePen, presidente del Frente Nacional durante cerca de 40 años, en 2011. Desde entonces, esta abogada de profesión ha tratado de mantenerse alejada de las invectivas racistas y antisemitas de su padre, sin rechazar el fondo de su discurso, contra la inmigración, el islam, la inseguridad y la Unión Europea.