México ha entrado en la tercera ola de la pandemia del coronavirus, en momentos en que las infecciones aumentan en 29% comparado con la semana previa.
Sin embargo el departamento de salud del país anunció el viernes que los casos nuevos en su mayoría provienen de sectores jóvenes menos vulnerables.
Los casos ahora están tan altos como lo estaban al inicio de la ola pasada en septiembre; esa ola tuvo su auge en enero y fue gradualmente descendiendo hasta junio.
Pero actualmente sólo un 22% de las camas en los hospitales del país están ocupadas; en la ola pasada, en varias zonas de la nación, las camas estaban casi totalmente ocupadas.
Las autoridades insisten en que el descenso relativo de los casos graves entre las personas mayores responde a la campaña de vacunación. Hasta el viernes, un 39% de todos los adultos en México habían recibido por lo menos una dosis.
El viceministro de salud Hugo López-Gatell afirmó que el aumento en el número de casos no se debe a la variante delta sino a la reanudación de las actividades sociales.
Las autoridades de salud de la Ciudad de México calculan que la tercera ola alcanzará su pico en agosto en la capital, que fue la zona más afectada en las dos olas pasadas.
México ha sufrido casi 235.000 decesos confirmados por coronavirus, pero debido a que el país realiza tan pocas pruebas, los expertos sospechan que la cifra real es de aproximadamente 360.000 decesos.