Porque García Luna es un personaje bastante importante en la seguridad del país
El Gobierno de México cooperará y proporcionará la información que requiera Estados Unidos, esto por la detención de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública, dijo este martes Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Sin embargo, apuntó que hasta el momento “no hemos sido requeridos, respecto a esa información”.
“México cooperará con cualquier investigación como lo hemos hecho en el pasado y más en este caso porque tiene que ver con asuntos que nos importan mucho, pero hasta ahora no hemos sido requeridos”, indicó.
Ebrard explicó que el caso está en manos de un fiscal, que es un procedimiento así establecido en Estados Unidos. Sin embargo, México está en la disposición de cooperar en los que se requiera.
Comentó que en caso de que García Luna requiera el apoyo del Consulado mexicano, se le proporcionará la asesoría necesaria, pues es un ciudadano mexicano y tiene derecho a ello.
A García Luna se le acusa de recibir sobornos del narcotráfico y falso testimonio, según un comunicado de la dependencia, de acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
"A cambio de sobornos multimillonarios, el acusado supuestamente permitió que el Cártel de Sinaloa operara con impunidad en México. García Luna fue arrestado ayer por agentes federales en Dallas, Texas, y el Gobierno buscará su traslado al Distrito Este de Nueva York para enfrentar estos cargos", detalló.
En el texto, la dependencia explica que el exfuncionario habría recibido millones de dólares del grupo que lideraba Joaquín 'El Chapo' Guzmán mientras era el encargado de la Policía Federal de México y de Seguridad Pública.
"El arresto de hoy demuestra nuestra determinación de llevar ante la justicia a quienes ayudan a los cárteles a infligir daños devastadores en los Estados Unidos y México, independientemente de los cargos que mantuvieron mientras cometían sus crímenes", aseveró Richard P. Donoghue, fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Este de Nueva York.
En el caso colaboraron las oficinas de la Administración de Control de Drogas (DEA) en Nueva York y Houston, el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) y Policía del Estado de Nueva York (NYSP).
Según la acusación, a cambio del pago de sobornos el Cártel de Sinaloa obtuvo seguridad para sus envíos de drogas, información confidencial sobre investigaciones oficiales y datos sobre cárteles rivales, lo que facilitó la importación de cantidades de toneladas de cocaína y otras drogas en los Estados Unidos.
"En dos ocasiones, el cártel entregó personalmente sobornos a García Luna en maletines que contenían entre tres y cinco millones de dólares. Según los registros financieros obtenidos por el gobierno, cuando García Luna se mudó a los Estados Unidos en 2012 había acumulado una fortuna personal de millones de dólares", señala el texto.
El Departamento de Justicia aseveró que el exfuncionario de 51 años continuó tomando medidas en los Estados Unidos para ocultar su "apoyo corrupto" a los narcotraficantes. Específicamente, afirma, presuntamente presentó una solicitud de naturalización en 2018, "en la que mintió sobre sus actos criminales pasados en nombre del Cártel de Sinaloa".
Si es declarado culpable del cargo de recibir sobornos del narcotráfico, García Luna enfrenta una sentencia mínima obligatoria de 10 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
La Justicia estadounidense destacó que "los cargos en la acusación formal son acusaciones, y el acusado se presume inocente a menos y hasta que se pruebe su culpabilidad".