Porque el 86% de los ciudadanos encuestados reprueba el gobierno de Peña Nieto
Enrique Peña Nieto logró lo que ningún presidente de México había alcanzado en los últimos 23 años: alcanzar el mínimo histórico de aprobación entre la ciudadanía, de acuerdo con una encuesta de Reforma.
La aprobación de Peña Nieto en enero de 2017 fue de 12%, con un 86% de los encuestados desaprobando su mandato.
La serie histórica de Reforma realiza mediciones de aprobación presidencial cada cuatro meses; sin embargo, el periódico realizó una encuesta especial en viviendas entre el 11 y el 15 de enero pasado a 1,000 mexicanos con un margen de error de +/- un 4.2%.
El presidente de México tuvo niveles de aprobación de un dígito en los rubros de empleo, combate a la corrupción y manejo de la economía, de acuerdo con los datos de Reforma.
GASOLINAZO, EL MOTIVO
Según la encuensta, el gasolinazo fue clave para que la aprobación de Peña Nieto fuera baja.
Un 85% de los consultados por Reforma consideraron que el alza de las gasolinas no está justificada y que los recursos que el gobierno obtendrá por el aumento serán mal utilizados.
La administración mexicana anunció a fin de 2016 un aumento de hasta 20% en los precios de las gasolinas y diésel a partir de enero y más ajustes en febrero y el resto del año, como parte de una liberalización gradual del precio del combustible.
Este aumento, conocido como el gasolinazo, provocó protestas y bloqueos de carreteras y calles, algunos acompañados de actos vandálicos.
¿QUÉ DICE PEÑA?
En una entrevista con Noticieros Televisa, en agosto de 2016, el presidente mexicano dijo que no le preocupaba ganarse medallas de popularidad por sus medidas gubernamentales.
"Desde que asumí la responsabilidad de ser presidente de México, tengo claro que no llegué aquí para ganarme una medalla por la popularidad, si así hubiese sido, entonces hubiese dejado de hacer los cambios, las transformaciones que el país necesita y que sé que le van a dar a México un futuro de mayor oportunidad, a lo mejor hubiese nadado de muertito, dejar las cosas como estaban, administrarlas y dejar de asumir los costos", destacó.