Nicandro Picazo, padre de Daniel, joven que fue asesinado en Puebla tras ser confundido con un secuestrador de menores, reveló este lunes que una persona intentó rescatar a su hijo pero los pobladores de Huauchinango no lo permitieron y continuaron la agresión contra el excolaborador de la Cámara de Diputados.
En entrevista para Televisa, reveló que Daniel acudió a la comunidad para pasear con unos amigos pero cuando llegó los confundieron con presuntos delincuentes.
Indicó que los dos amigos que le acompañaban huyeron de la zona pero él se quedó para intentar mediar las cosas aunque los pobladores respondieron con agresiones.
Agregó que un testigo de los hechos intentó rescatarlo pero únicamente le permitieron tomar su cartera para identificarlo. Con sus datos, esa persona se comunicó a la Cámara de Diputados, donde Daniel Picazo se desempeñó como asesor parlamentario.
Nicandro Picazo mencionó que fue el personal legislativo quien se comunicó con él para reportar la situación de su hijo aunque no contaban con más información. Horas más tarde recibió una llamada en la que se le pidió ir a reconocer el cuerpo.
"Hubo una persona de testigo, que vive ahí en el pueblo y nos contó muchas cosas. Daniel estaba pidiendo ayuda, el chavo intentó ayudar y el pueblo no lo dejó...entonces llegó la gente muy loca, lo bajaron, lo golpearon, lo apedrearon, luego lo prendieron", lamentó.
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, calificó el hecho como un acto de barbarie que inició por "prejuicios, ignorancia y rumores" de los pobladores.