Bajo estrictas medidas de seguridad, los 167 presuntos integrantes de Pueblos Unidos continúan declarando en las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) en Michoacán.
Centenares de soldados, guardias nacionales y policías estatales se encuentra fuertemente armados en el exterior de la institución, con sede en Morelia.
Esto con el propósito de salvaguardar el orden público, ante la presencia de familiares de los detenidos.
En la avenida Acueducto de la colonia Lomas de Hidalgo, aproximadamente 200 personas exigen la libertad de los presuntos infractores de la ley.
Con cartulinas de varios colores, los manifestantes tratan de aclarar que los indiciados son campesinos y no criminales.
Mientras tanto, los detenidos que están acusados de traer armas de uso exclusivo del Ejército Mexicano, siguen declarando ante el ministerio público federal.
En las próximas horas, la FGR determinará si remite a un juez a los imputados o los deja en libertad.
La aprehensión de los posibles integrantes del grupo Pueblos Unidos, tuvo lugar el sábado en las inmediaciones de un tramo carretero entre Uruapan y Pátzcuaro.
En respuesta, habitantes de la zona bloquearon carreteras y quemaron vehículos automotores.
Cabe señalar que el grupo armado Pueblos Unidos se autoproclama como autodefensa en el estado. Sin embargo, para el Gobierno de Michoacán es un grupo que responde a intereses del crimen organizado.