Porque esta ventaja pareciera irremontable a días de que los mexicanos elijan a su próximo presidente
A cuatro días de celebrarse las elecciones presidenciales, Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PT y Encuentro Social), cuenta con el 54% de la intención de voto efectiva, aventajando por poco más de treinta puntos a sus competidores Ricardo Anaya, la coalición Por México al Frente (PAN, PRD y Movimiento Ciudadano), quien obtiene 21%, y José Antonio Meade, de la coalición Todos por México, que encabeza el PRI, quien capta el 22%.
En tanto, el candidato independiente Jaime Rodríguez Calderón el Bronco, cuenta con 3%. Así lo revela la última encuesta de El Financiero realizada a mil 420 electores en las 32 entidades entre el 15 y el 23 de junio. El sondeo tiene un margen de error estimado de +/-2.6%.
Estos resultados reflejan otro avance de López Obrador de 4 puntos desde principios de junio, y un retroceso de Anaya de tres puntos, mientras que Meade se mantiene estable.
De acuerdo con el estudio, la participación electoral este 1 de julio podría ser de alrededor de 64%, lo cual equivaldría a unos 57 millones de votantes, poco más o poco menos.
De ser así, el escenario de votación entre los votantes probables; es decir, aquellos electores que son más probables de acudir a las urnas a emitir su voto, arroja 55% de las preferencias para López Obrador, 22% para Anaya, 19% para Meade, y 4% para el Bronco.
Bajo cualquiera de estos escenarios, el puntero lleva una cómoda ventaja rumbo al 1 de julio, pero el sondeo no prevé un claro segundo lugar.
Lo que sí revela la encuesta es que de los electores que dieron su voto a Enrique Peña Nieto en 2012, el 42% refrenda actualmente su apoyo al candidato del PRI, José Antonio Meade, mientras que 38% prefiere hoy a López Obrador y el 15% a Anaya. La mayoría del voto peñista de 2012 se ha vuelto opositor.
De los votantes que sufragaron por la panista Josefina Vázquez Mota en 2012, el 59% apoya hoy a Anaya y el 31% prefiere a AMLO.
Además de atraer votantes que no apoyaron su candidatura en 2012, López Obrador mantiene el 89% del apoyo que recibió hace seis años.
Entre los electores que no votaron en 2012, una mayoría de 52% se inclina hoy por el candidato de Morena, mientras que Anaya y Meade obtienen 22% para cada uno.
En esta última encuesta previa a los comicios del próximo domingo se midieron las percepciones acerca de qué hicieron principalmente los candidatos en sus campañas: propuestas o ataques. El 57% opina que López Obrador se dedicó principalmente a hacer propuestas, mientras que el 36% cree que se dedicó a atacar a otros candidatos.
En contraste, a Ricardo Anaya el 63% lo percibe como un candidato de ataques y el 27% de propuestas. En los casos del Bronco y José Antonio Meade, el 33 y 32% los vieron propositivos, respectivamente, mientras que 57 y 60% los vieron más dedicados al ataque. Según estos datos, Andrés Manuel López Obrador fue el candidato más propositivo y Anaya el más negativo.
De acuerdo con la encuesta, el 48% de los consultados cree que López Obrador será el ganador de los comicios, frente al 14 y 12% que señalan a Anaya y a Meade, respectivamente, como probables vencedores.
En las contiendas para diputados federales, Morena obtiene 45% de las preferencias a nivel nacional en esta última encuesta, y la coalición que encabeza suma 49%.
El PAN y PRI obtienen el 20% cada uno, y sus alianzas sumadas captan 26 y 24%. Desagregando, el PRD cuenta con 4%, el PVEM, 3%; el PT, 3%; MC, 2%, y el Panal y el PES 1% cada uno.
METODOLOGÍA
Encuesta nacional con entrevistas cara a cara en vivienda realizada del 15 al 18 de junio y del 21 al 23 de junio a 1,420 electores en las 32 entidades federativas. Las entrevistas se llevaron a cabo en 132 puntos seleccionados probabilísticamente con base a las secciones electorales del INE.
La tasa de rechazo a las entrevistas fue de 41%. Con un nivel de confianza de 95%, el margen de error estimado es de +/- 2.6%. La publicación incluye una estimación de preferencias de los votantes probables, considerando varios factores como el interés en la política y la probabilidad subjetiva de acudir a votar.
“Los resultados reflejan las preferencias electorales y las opiniones de los encuestados al momento de realizar el estudio y son válidos para esa población y fechas específicas”.