Porque las declaraciones de Anaya provocaron un cambio en el seguimiento que el gobierno da a los precandidatos
¿Ricardo Anaya quiere un Oscar?
Quizá, de acuerdo con lo que comentó este viernes el precandidato de la coalición Todos por México (PRI, Nueva Alianza y Partido Verde), José Antonio Meade.
El exsecretario de Hacienda dio su opinión sobre la acusación que hizo este lunes Ricardo Anaya Cortés, precandidato de la coalición Por México al Frente, sobre un supuesto espionaje en su contra por parte del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
"Nosotros no estamos en ninguna agenda de riesgo, en la precampaña nos hemos preocupado fundamentalmente de comunicar propuestas y no de hacer producciones cinematográficas", dijo Meade.
El precandidato de la coalición Todos por México aseguró que su campaña es la que más ha crecido en nivel de conocimiento, en un escenario desigual, porque -dijo- Andrés Manuel López Obrador ha aparecido en 300 millones de spots y Ricardo Anaya en más de 59 millones.
Cabe mencionar que este martes el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, aseguró que Ricardo Anaya no es víctima de espionaje sino que solo se le realiza un seguimiento como parte de un protocolo de seguridad para los precandidatos presidenciales.
OCHOA, CON MEJOR LIDERAZGO
La gestión de Enrique Ochoa Reza al frente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) es mejor que la de Damián Zepeda en el PAN, agregó José Antonio Meade.
"Cuando contrastamos a la del PRI con la del PAN es una gestión en donde de este lado hay emoción, hay las dificultades naturales de procesar las campañas, pero hay unidad y generosidad en el procesamiento. Del otro lado hay prácticamente un éxodo de las principales figuras que le han dado a esos partidos reconocimiento y posibilidad de competir".