Porque ordeñar tomas clandestinas de combustible es un riesgo para la vida
El pasado 18 de enero una explosión ocurrida en una toma clandestina de un ducto de Pemex ubicado en Tlahuelilpan, Hidalgo, dejó hasta el momento 91 muertos.
Todo comenzó a las 5 de la tarde, cuando se informó de una fuga de combustible en la carretera Tlaxcoapan-Tlahuelilpan en el municipio de Tlahuelilpan.
Videos que circulan en redes sociales, muestran a cientos de personas recolectando gasolina de la toma clandestina con diversos tipos de envase.
Pemex informó que se trataba de una toma clandestina de combustible, es decir, una toma del huachicoleo.
Una grabación también captó el momento de la explosión minutos después de las 7 de la noche. Con un audio aterrador, se puede observar a personas correr tratando de apagar el fuego de sus cuerpos.
También fotógrafos del sitio Cuartoscuro capturaron momentos de la tragedia.
Tras la explosión y después de 6 horas de trabajo se logró controlar el fuego y hasta el lugar llegaron peritos que se encargarán de la investigación de los hechos.
Fuente: Cuartoscuro
El gobierno federal informó que miembros del Ejército llegaron hasta el lugar e intentó persuadir a las personas que se encontraban en el lugar de terminar con la ordeña del ducto, sin embargo, al verse rebasados en números decidieron replegarse.
"Es difícil que 25 hombres pudieran detener a 600 u 800 personas y más si los pobladores están convencidos de que deben ir por el producto. Al verse rebasados completamente por la cantidad de gente que esta enfrente de ellos, lo mejor para ambas partes es retirarse"
«Luis Cresencio Sandoval»
Por su parte, el gobernador del estado, Omar Fayad, llamó a la población a no robar combustible pues además de ser un ilícito, pone en riesgo la vida.