Porque el gobierno federal emprendió una estrategia contra el huachicoleo
Una explosión en un ducto de Pemex en Tlahuelilpan, Hidalgo, provocó la muerte de al menos 21 personas y más de 70 heridos, de acuerdo con autoridades.
La explosión se dio horas después de que presuntos huachicoleros abrieran una toma clandestina en el ducto. Elementos del Ejército llegaron al lugar a donde personas de las poblaciones acudieron para tomar el combustible que se derramaba por la fuga.
Tras el accidente, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, instruyó al gobierno federal a brindar atención a las víctimas y a sus familias, así como a detener el fuego.
El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, confirmó que hay 20 personas muertas y más de 60 heridas tras la explosión del ducto de Pemex.
Entrevistado por Foro TV, Omar Fayad aseveró que autoridades estatales y federales se encuentran atendiendo la situación.
En una de las grabaciones se escucha a una mujer narrando los hechos, asegurando que "hay gente corriendo quemada y que pide ayuda", explica que no se "sabe exactamente qué pasó, ni porqué se prendió".
TRABAJO SIN AFECTACIONES
Mediante un comunicado, Pemex informó que ya hay personal de la dependencia tratando de controlar la fuga y el incendio. Además, aseguró que esta fuga no afecta el suministro de gasolina para la Ciudad de México.
PLAN DN III
La Secretaría de la Defensa Nacional informó que se activó el plan DN III en la zona para atender a la población afectada.
Y EN QUERÉTARO TAMBIÉN
Este mismo viernes se reportó la explosión de otro ducto de Pemex, pero ahora en San Juan del Río, Querétaro.
De acuerdo con Pemex, esta explosión se debió nuevamente por una toma clandestina en uno de sus ductos provocada por huachicoleros.
En este caso, el incendio se dio en una zona despoblada por lo que no hay afectación para la población.