Porque los investigadores aseguran que se debe enseñar bien a la gente como usar las mascarillas y a así ayudar a evitar una tragedia
El uso masivo de cubrebocas sí es considerado como un factor clave para frenar la curva de contagio de COVID-19 en México, aseguraron a El Financiero Jorge Baruch Díaz y Jorge Castañeda Sánchez, catedráticos de la UNAM y de la UAM.
“Existe evidencia científica de que el uso de cubrebocas sí funciona bajo ciertos esquemas de salud. En un ambiente de hospital se reduce el riesgo de contagio, si se usa cubrebocas, hasta en un 40%”, dijo Díaz.
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) siempre ha recomendado su uso para enfermedades de tipo respiratorio por su efectividad”, agregó Castañeda.
En entrevistas por separado, coincidieron en que la obligatoriedad de uso para toda la población tendría que ser ordenada hasta que el Estado garantice el abasto de éste y otros insumos al personal sanitario, primera de línea de combate.
Asimismo, aseguraron que la medida tendría que ser acompañada de una campaña informativa de largo alcance a la población para el correcto uso del cubrebocas, ya que de lo contrario, poco serviría la medida e incluso “podría generarse una tragedia”.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador se ha negado reiteradamente a ordenar el uso masivo de cubrebocas.
Hugo López-Gatell, vocero del gobierno federal para el tema COVID-19, advirtió en días pasados que las mascarillas o cubrebocas simplemente “dan una falsa sensación de seguridad”, pero no son una medida efectiva para evitar la propagación.
La postura no es compartida por los gobiernos de las 32 entidades. De hecho, al menos 6 estados, Aguascalientes, Puebla, Yucatán, Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila, ya ordenaron la obligatoriedad.
Castañeda Sánchez, investigador del Departamento de Sistemas Biológicos de la UAM-Xochimilco, dijo que la negativa de los gobiernos a recomendar el uso masivo de cubrebocas tiene que ver más con el desabasto de producto.
“En este caso de los contagios por Covid-19 tiene que ver un tema de desabasto, y esto se ha generado sobre todo por el pánico que se suscitó en todo el mundo”, señaló.
Díaz, académico de la facultad de Medicina de la UNAM, consideró que el gobierno ha modulado su discurso sobre el uso de cubrebocas y agregó que mientras no existen las condiciones adecuadas, el gobierno hace bien en mantener una posición balanceada.
"Si un país o un estado tienen garantizado el abasto de cubrebocas para el personal de la Salud y los grupos más vulnerables, entonces ya puede transitar a la generalización del uso del cubrebocas, de lo contrario se pone en riesgo a toda una comunidad”, mencionó Díaz.
Agregó que en China, Singapur o Corea del Sur implementaron el uso obligatorio de cubrebocas y tuvieron éxito en la disminución de la curva de contagio. En España el gobierno ya está proveyendo cubrebocas en forma masiva.
Los investigadores aclararon que el cubrebocas “no es la panacea, pero su uso generalizado sí facilita el control del epidemia”.