Este miércoles, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechazó amparar a un ciudadano de Puebla, quien pretendía contraer matrimonio con dos mujeres al mismo tiempo y abrir la puerta a las relaciones poliamorosas en México.
La Primera Sala de la Corte confirmó la definición de matrimonio y concubinato contenidas en el Código Civil de Puebla, en la que se hace una limitación exclusiva a uniones entre dos personas.
Pese a que la ley no contempla la unión entre más de dos personas, en la práctica, este tipo de relaciones son más comunes de lo que imaginamos pero... ¿de qué va el poliamor?
¿CÓMO SE EXPLICA EL POLIAMOR?
El poliamor es una práctica libre de relacionarse con distintas personas sin importar su género, orientación sexual ni el número de integrantes, siempre que exista conocimiento de todos los involucrados y consentimiento en la forma en que funcionará la relación.
De acuerdo con Eduardo Calixto González, profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), amar a varias personas al mismo tiempo es una condición que se da tanto en hombres como en mujeres, pero ambos lo hacen por distintas razones.
Por ejemplo, señala en una entrevista con Gaceta UNAM, que los varones lo hacen con gran facilidad por los niveles de testosterona que manejan. Para ellos se trata de un proceso netamente egocéntrico y lúdico, de hecho eligen a través del atractivo físico. “Una manera muy práctica”.
En cambio, explica, las mujeres lo hacen por medio del olfato. Ellas son capaces de detectar a través del aparato vomeronasal (órgano vinculado con la captación de feromonas) a los mejores candidatos biológicamente, desde el punto de vista inmunológico y los mejores genes.
Cuando los genes son diferentes a los de ella identifica al hombre sumamente atractivo independientemente del físico. Por eso, cuando una mujer ama a dos personas, selecciona de manera más inteligente.
De hecho, ellas pueden amar muy bien a la primera pareja y estar enamoradas de la segunda. En el caso de los hombres prácticamente este proceso es de búsqueda de enamoramiento constante sin necesidad de buscar el amor real.
Detalla que, a diferencia del poliamor, la monogamia es un evento construido social y psicológicamente, no es un suceso biológico. “Esto nos hace diferentes a todas las especies de mamíferos, somos los únicos que estamos con una sola pareja por mucho tiempo”.
Explica que la construcción de estos vínculos logran que el cerebro esté a gusto y tranquilo, e incluso desde el punto de vista social obtiene ventajas: permanecer con una sola persona que nos ama a largo plazo, tener hijos, dejarlos ir y seguir con la misma pareja.
No obstante, desde el punto de vista biológico el cerebro siempre busca todo aquello que le gusta, apasiona y lo hace feliz. Por este motivo, “podemos amar a varias personas al mismo tiempo.”
El cerebro es capaz de amar a dos personas al mismo tiempo, sobre todo antes de los 25 años en los hombres y los 21 años en las mujeres. Cuando el cerebro madura es capaz de elegir y quedarse con una sola pareja.