Diputados y diputadas de la Ciudad de México presentaron una nueva iniciativa conocida como ‘Ley Maple’, la cual busca proteger a animales de compañía en espacios como hoteles y campamentos para perros.
Esta iniciativa fue presentada por el diputado Roy Torres, de Movimiento Ciudadano, y Ana Villagrán, del PAN. En la presentación estuvieron presentes Adriana, dueña de Maple; Nydia, dueña del perrito Mixtli; y Héctor, dueño de la gata Cata.
La Ley Maple fue presentada por el diputado emecista Royfid Torres el martes, la cual busca una normatividad para negocios que trabajan con animales de compañía.
“Lo que buscamos en esta ley de protección animal es regular estos establecimientos en particular que hoy operan sin ninguna normatividad, hablo de las pensiones y hoteles para mascotas, y los centros de entrenamiento y adiestramiento canino en particular, porque están proliferando este tipo de establecimientos pero no hay ningún permiso, no hay ninguna regulación que tengan que cumplir para dar este tipo de servicios”, puntualizó el legislador capitalino.
La reforma propone que las alcaldías de la Ciudad de México regulen el funcionamiento de hoteles, pensiones y centros de adiestramiento, para que autoridad y establecimiento estén en constante comunicación para que se brinden los servicios de manera adecuada, puntualizó.
Ana Villagrán explicó que es necesario regular los establecimientos que trabajan con animales de compañía, como hoteles y campamentos de entrenamiento, así como con las veterinarias.
“Por una regulación, no estigmatización, de todos los negocios que son hoteles, centros de entrenamiento, guarderías y pensiones de animales de compañía, para que nunca más vuelvan a devolver a un animal a su cargo muerto y con sospechas de maltrato”, apuntó la diputada local en su cuenta de Twitter.
La diputada Villagrán aclaró en la conferencia que no se está en contra de quienes emprenden en este tipo de negocios (pensiones y centros de entrenamiento canino), sino que se busca regular los servicios que brindan a las mascotas, que forman parte de las familias.
Adriana, una joven capitalina, llevó a su perro Maple (un Shiba Inu) al campamento You can dog training. En la primera ocasión todo salió bien, pero en la segunda, la mascota ya no volvió.
“El pasado 10 de julio regresaba Maple (...) Ese día, a la 1:05 a.m., me escribió Valeria J., novia de Antonio (dueño del campamento canino). Me dijo que Antonio iba de camino al veterinario porque Maple había chillado y creían que lo había picado una serpiente”, contó la dueña en una iniciativa de Change.org.
Aunque Adriana y su pareja estuvieron intentando que Antonio les diera información sobre la clínica veterinaria a donde llevarían a su mascota, esto no sucedió. Fue hasta las 3:26 a.m. que les informaron que Maple no había resistido la mordida y les informaron que procederían a cremarlo, algo que la familia del lomito no autorizó.
Antonio y Valeria entregaron una urna con cenizas a la familia de Maple, alrededor de las 4 horas de la madrugada del mismo día, en el Deportivo Xochimilco.