Ulises Lara, vocero de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México informó que, como resultado de las investigaciones que el órgano realizó, se determinó que la joven María Ángela Olguín, quien desapareció en el paradero de Indios Verdes el pasado 19 de enero, se ausentó voluntariamente y no fue víctima de ningún delito.
Con una línea de tiempo, Lara detalló que la menor llegó el pasado 19 de enero a un campamento de un colectivo ubicado en las inmediaciones de Bellas Artes, en donde le brindaron apoyo.
“La adolescente arribó a un campamento de un colectivo ubicado en inmediaciones del palacio de Bellas Artes, ahí le brindaron apoyo al pensar que se trataba de una persona perdida, luego de que les solicitó ayuda para dormir”, dijo.
Según la investigación de la Fiscalía, una integrante de este colectivo le dio asilo en su domicilio ubicado en Nezahualcóyotl, estado de México. El 20 y 21 de enero, María Ángela regresó con dicha persona a Bellas Artes.
No obstante, para el 21 de enero integrantes del colectivo la identificaron y dieron aviso a las autoridades. Al percatarse de ello, la joven se alejó y no tuvieron más contacto físico con ella, únicamente la persona que le había dado asilo recibió un mensaje de texto en el que María Ángela avisó que estaba bien.
“Con esta investigación, que incluyó revisiones médicas, psicológicas y periciales a la adolescente, pudo establecerse plenamente y con elementos contundentes que la menor no presentaba algún daño y que su ausencia no tuvo relación alguna con la comisión de algún delito”, informó el vocero de la fiscalía del a Ciudad de México.
El 21 de enero Ángela Olguín fue localizada en el municipio de Nezahualcoyotl, Estado de México, donde posteriormente fue trasladada a instalaciones de la Fiscalía capitalina para encontrarse con sus padres.