Taylor Lorenz del Washington Post se convirtió en la última periodista en ser expulsada de Twitter, luego de una oleada de suspensiones de cuentas por parte del director general de la compañía, el multimillonario Elon Musk.
Lorenz informó que ella y otro reportero del diario, Drew Harwell, estaban investigando para un artículo sobre Musk. Ella había tratado de comunicarse con el multimillonario en los últimos días, pero sus intentos no consiguieron respuesta, así que trató de contactarlo el sábado 17 de diciembre publicando un tuit en el que mencionó a Musk y le pedía que le concediera una entrevista. El tema en específico de dicha entrevista no fue dado a conocer.
Horas después, cuando volvió a utilizar la red social para revisar si había recibido alguna respuesta, Lorenz encontró una notificación de que su cuenta había sido “suspendida permanentemente”.
“No diré que no lo esperaba”, comentó Lorenz en una entrevista telefónica el domingo por la mañana con The Associated Press. Dijo que no le dieron una razón en particular por la suspensión.
La semana pasada, Twitter suspendió las cuentas de periodistas que cubren la red social y a Musk, entre ellos reporteros de The New York Times, del Washington Post, CNN, Voice of America y otros medios de comunicación. Muchas de esas cuentas fueron reactivadas luego de una encuesta publicada por Musk.
La oleada de cuentas de periodistas suspendidas se produjo luego de la decisión de Musk anunciada el miércoles 14 de diciembre de prohibir permanentemente una cuenta que monitoreaba automáticamente los vuelos de su avión privado, utilizando datos de dominio público. También condujo a Twitter a cambiar sus reglas para todos los usuarios a fin de prohibir que compartan la ubicación actual de otra persona sin su consentimiento. Muchos de los reporteros a los que les suspendieron sus cuentas habían estado reportando sobre la situación.