El presidente Andrés Manuel López Obrador acaba de concretar la desaparición de un grupo especial de trabajo de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) que operaba en México, pero ¿a qué se dedica esta agencia y cómo ha combatido al narcotráfico en el país?
La DEA es la dependencia encargada de combatir el narcotráfico dentro de la Unión Americana y de “coordinar investigaciones estadounidenses relacionadas a las drogas en el exterior”, de acuerdo con el gobierno estadounidense.
La agencia se creó en julio de 1973 para enfrentar el creciente problema de las drogas en Estados Unidos, bajo el gobierno del expresidente Richard Nixon. El objetivo era tener un comando unificado para combatir la epidemia de las drogas, en el que se conjuntaran todas las pequeñas oficinas que se encontraban en diferentes departamentos del gobierno.
El presidente Nixon temía que su guerra contra las drogas se viera obstaculizada por la falta de coordinación entre las diferentes dependencias y buscaba mejorar la recopilación de información por parte de las organizaciones de inteligencia.
¿QUÉ HACE LA DEA?
Una de las labores más importantes de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos es la de inteligencia, ya que permite evaluar las operaciones y debilidades de la delincuencia organizada.
Sus trabajos de inteligencia se dividen en las categorías táctica, operación y estrategia y sus reportes ayudan a otras dependencias federales cuando se requiere.
Además, sus esfuerzos se han concentrado en investigar a organizaciones delincuenciales que producen droga que llevan a Estados Unidos, entre ellos México.
La agencia no sólo ha colaborado en operaciones contra el narcotráfico en territorio mexicano, también lo ha hecho en países como Colombia, Brasil, Bolivia, Jamaica, Perú y Venezuela.
COLABORACIÓN ENTRE LA DEA Y MÉXICO
La cooperación entre México y la DEA comenzó tan sólo un año después de la creación de la agencia. Según los archivos de la administración, el gobierno mexicano pidió en 1974 que Estados Unidos le otorgara asistencia técnica para combatir el tráfico de heroína.
El primer proyecto en el que colaboraron fue en la Operación SEA/M, para luchar contra el narcotráfico en Sinaloa. Después siguió una operación especial en Guerrero y la Trident, para controlar la droga fabricada en México.
En 1976, desplegaron la Operación Trizo, en la que agentes mexicanos volaron helicópteros estadounidenses para rociar herbicidas en campos de amapola en Durango, Sinaloa y Chihuahua. La continua cooperación también ayudó a la detención de Jaime Herrera-Nevares, jefe de Los Herrera, en 1988.
LA TENSIÓN POR “KIKI” CAMARENA
El mayor conflicto entre México y la DEA fue el asesinato del agente estadounidense Enrique “Kiki” Camarena, en 1985. Las investigaciones de la agencia revelaron que el homicidio estuvo plagado de corrupción y complicidad de funcionarios mexicanos.
Los principales sospechosos del crimen fueron Rafael Caro Quintero, Miguel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo
Luego del asesinato de “Kiki” agentes de la DEA, pagaron a funcionarios mexicanos para secuestrar a un médico que supuestamente participó en el secuestro de Camarena. Por ello, en 1992, el gobierno de México impuso reglas para la operación de la agencia en territorio nacional.
Entre las reglas de operación, se limitó el número de agentes y se definieron las ciudades en las que podrían vivir. Además, se les restringieron los viajes sin permiso del gobierno mexicano y se les negó la inmunidad procesal.
Además, se prohibieron las armas para los agentes de la DEA y se les indicó que debían transmitir toda información de inteligencia que pudiera ser útil.
MEJORA LA RELACIÓN EN EL NUEVO MILENIO
Durante el gobierno del expresidente mexicano Vicente Fox se registró una de las mejores épocas en la relación con la DEA. Esto llevó a la detención de cabecillas del grupo criminal de Amado Carrillo-Funtes, Osiel Cárdenas-Guillén, a los hermanos Arellano Félix y a la incautación de cientos toneladas de droga.
Además, la DEA y la Policía Federal descubrieron en 2002 uno de los túneles más importantes por donde se transportaba droga de Baja California a California.
En los años siguientes también se detuvo a importantes capos de La Familia Michoacana y a Edgar Valdez-Villareal, alias “La Barbie”.
SALVADOR CIENFUEGOS
La Administración de Control de Drogas armó el expediente sobre Salvador Cienfuegos, exsecretario de la Defensa Nacional, que sirvió para respaldar su detención en octubre de 2020, en Estados Unidos.
El informe contenía mensajes de texto interceptados en los que supuestamente los narcotraficantes hacían referencia al militar.
Sin embargo, la Fiscalía General de la República (FGR) desestimó todos los cargos contra Cienfuegos y lo liberó luego de que las autoridades estadounidenses lo entregaron a México.
Después del caso del exsecretario de la Defensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador modificó la Ley de Seguridad Nacional para regular las acciones de los agentes extranjeros en México, entre ellos a los de la DEA.
SIU
El grupo de las Unidades de Investigación Sensible (SIU) se formó hace más de dos décadas y estaba el control del gobierno, pero con agentes que tenían entrenamiento de la DEA. SIU opera en más de 15 países y en México colaboró para capturar a Joaquín “El Chapo” Guzmán, en 2016.
SUI también apoyó al arresto de Jose Antonio “Diego” Acosta-Hernandez, líder de un brazo del Cártel de Juárez, y a Armando Villarreal-Heredia, uno de los principales operadores del Cártel de los Arellano Félix.
Sin embargo, el gobierno actual de López Obrador ordenó la desaparición del grupo al acusar que estaba infiltrado por la delincuencia organizada.