A veces te acercas a un tianguis concurrido, localizando un espacio en donde no estorbes a los puestos y que haya un poco de sombrita. A veces te pones afuera de un supermercado, tocas puertas o te vas a un parque. Pero en todas las ocasiones buscas otro rostro, esa persona que puede firmarte para lograr una candidatura independiente.
Suplicas al destino que traigan credencial para votar, pues muchas personas dejan sus identificaciones en casa por miedo a ser asaltados en sus traslados; ruegas que sean de la demarcación que te toca, pues dependiendo del caso podrían firmar sólo las personas de un distrito, municipio o estado específico; y finalmente esperas que no tengan prisas, que tengan un par de minutos libres para concretar esa firma, que significa el apoyo ciudadano que requiere el INE.
La tarea no es sencilla, la política en nuestro país genera un ceño fruncido en automático. No son pocas las ocasiones que al escuchar de lo que se trata te digan que nada va a cambiar y que no vale la pena el esfuerzo.
Ante eso, debes esgrimir argumentos, invitar, poner tus ideas y, al final, cerrar el trato con una invitación, que puede variar dependiendo el talante de tu interlocutor: “¿Te gustaría darle su permiso para a llegar a la boleta? ¿Quisieras tener una opción independiente el día de la elección?”.
En el momento que acceden a entregarte su credencial podría parecer que acabaría el enredo por conseguir las firmas, sin embargo aún faltan muchos pasos más para lograr registrar el apoyo de manera correcta.
A partir de ese momento se debe corroborar que la credencial esté vigente, que sea de la demarcación adecuada, que los datos que compiló la aplicación estén correctos (una de cada dos veces toma mal la información), tomar la fotografía de quien te da su apoyo con buena luz para que los oficiales del INE puedan certificarla, y, finalmente, que la persona firme como lo hizo en su credencial.
Todos estos puntos son saldados con rapidez y pueden ser ejecutados sin problemas por alguien que recolecta firmas de manera regular en un promedio de dos minutos y quizás en cinco minutos en el caso de un auxiliar sin experiencia.
Descuidar cualquiera de estos pasos es un error y podría significar enviar credenciales sin la validación jurídica para el proceso. Por este motivo cobra relevancia la publicación que hizo ayer el INE sobre la enorme discrepancia que existe entre la cantidad de “firmas enviadas” de las “firmas válidas” para muchas aspiraciones.
Esencialmente la diferencia radica en que se debe procesar y analizar que aquellas firmas que se envían día con día al Instituto no se dupliquen, estén dadas de alta en la lista nominal o que correspondan a la entidad adecuada. Por poner un ejemplo, si dieras de alta tres veces la misma persona, en el conteo oficial aparecerían tres bajo el concepto de “firmas enviadas” pero sólo una sería “firma válida”.
Esto ha mermado de manera significativa en los números de la mayoría de las aspiraciones a la presidencia de la República. Por poner algunos ejemplos, veamos a los tres punteros.
En el caso de “El Bronco” se presenta un avance de 853 mil 633 “firmas enviadas”, lo que podría significar que ya alcanzó el 98.5% de firmas necesarias para su aspiración.
Sin embargo la información actualizada al día de ayer demuestra que en las “firmas válidas” este número se desploma a 448 mil 12. Es decir, en un solo día se redujo a casi la mitad los apoyos que creía tener en la bolsa. Margarita Zavala amaneció con 414 mil 555 firmas, de las cuales el INE reconoce como válidas casi 298 mil firmas.
Finalmente, el tercer recolector más aventajado es Armando Ríos Piter, quien reporta 269,248 firmas enviadas, de las cuales sólo 89,250 fueron reconocidos en el listado nominal según la autoridad, lo cual lo deja en casi un empate con las 82 mil firmas válidas que María de Jesús Patricio, vocera del CIG, reportaba el día de ayer.
Este ejemplo nos ayuda a entender lo importante que significa que quienes recojamos firmas para alguna aspiración seamos siempre diligentes con todos los pasos, que redoblemos fuerzas durante diciembre y que nos activemos para lograr las firmas requeridas para las aspiraciones con las que simpaticemos.