En la discusión sobre el tema de las gasolinas, hay mucha ideología y pocos hechos y datos. Al margen de la postura que uno tenga, es conveniente estar documentados. Van algunas cifras que me parecen relevantes.
1-De acuerdo con la Encuesta de Gasto de los Hogares realizada por el INEGI, del total de los gastos que las familias mexicanas realizan en gasolinas y lubricantes (así los agrupan), el 64 por ciento de lo desembolsado corresponde al 20 por ciento de mayores ingresos. El 60 por ciento de las familias de menores ingresos, es decir, algo así como 72 millones de personas, realiza solo el 14.1 por ciento del gasto total en gasolinas. Si hubiera un subsidio a las gasolinas, éste sería altamente regresivo pues beneficiaría principalmente a los sectores de mayores ingresos.
2- Del gasto total realizado por el 20 por ciento de familias más pobres del país, solo el 0.8 por ciento, es decir, menos del 1 por ciento, se destina a pagar gasolina. Esta proporción alcanza el 5.6 por ciento del gasto total promedio en el caso del 20 por ciento de los hogares de más altos ingresos. La estructura de consumo de la gasolina es diferente a la de otros bienes, como los de la canasta básica, y está altamente concentrada en los estratos de mayores ingresos.
3- Sorprende que los partidos de la izquierda se sumen a las propuestas de los grupos empresariales, que demandan recortes del gasto público para impedir que las gasolinas suban de precio. Se puede entender esta propuesta entre quienes piensan que el Estado debe ser pequeño y con pocas tareas –como legítimamente piensan las corrientes liberales- pero resulta una muestra de puro oportunismo político-electoral entre los que piensan que debe gravarse más a quienes tienen más ingresos, como presuntamente opinan –o al menos opinaban- las corrientes de la izquierda.
4- La decisión de ajustar los precios de las gasolinas está implícita en la Ley de Ingresos que fue aprobada en octubre por la Cámara de Diputados y que fue aprobada por todos los diputados priistas asistentes; por todos los panistas; por 42 de los 60 perredistas que asistieron. Votaron en contra solo 8 perredistas y 35 legisladores de Morena. Posteriormente, los senadores también la aprobaron y votaron a favor todos los priistas (40), 15 senadores del PAN y 7 del PRD, de los mayores grupos parlamentarios. En contra estuvieron 7 del PAN y 3 del PRD. En la Ley que autorizaron los legisladores de los mencionados partidos, se establece un monto de ingresos para el Estado de 209 mil 386 millones de pesos por concepto de IEPS a las gasolinas.
5-En enero de 2016, de acuerdo con el Sistema de Información Energética de la Sener, el costo de adquisición de cada litro de gasolina Magna fue de 5.44 pesos en promedio. En enero de 2017, el costo de adquisición empieza en 8.15 pesos, es decir hubo un incremento de 49.8 por ciento o 2.71 pesos. En contraste, el IEPS total aplicado a la Magna en enero de 2016 fue de 4.17 pesos por litro mientras que el correspondiente a 2017 es de 3.18 pesos, es decir, bajó en 99 centavos equivalente a 33 por ciento.