Ecuador entró en un estado de excepción por 60 días, tras una serie de hechos violentos que se desataron con la fuga de uno de los reclusos más peligrosos del país: Fabricio Colón Pico.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, firmó el decreto ejecutivo sobre el estado de excepción, que incluye un artículo sobre la restricción a la libertad de tránsito o toque de queda de seis horas, que irá desde las 23:00 horas hasta las 05:00 horas de la mañana.
Además, la medida considera que "las personas que circulen durante el horario de toque de queda serán puestas a órdenes de la autoridad judicial competente".
El decreto, no obstante, tiene algunas excepciones, pues deja fuera del 'toque de queda' a los servicios de salud pública y privada, a los miembros de la fuerza pública, servicios de emergencia, servidores gubernamentales y el cuerpo diplomático.
También a personal de la industria con labores nocturnas, viajeros con vuelos programados, abogados con justificación y trabajadores de medios de comunicación.
El decreto suspende a la par, el derecho a la libertad de reunión en el territorio nacional y en las cárceles, así como el derecho a la inviolabilidad de domicilio y al de la correspondencia en el sistema penitenciario.