El político de Izquierda, Lula da Silva, se impuso ante Jair Bolsonaro con el 50.7% de los votos en Brasil y será el nuevo presidente de la economía más grande de América Latina.
En la primera vuelta de las presidenciales, realizada el 2 de octubre, el expresidente Lula (2003-2010) fue el candidato más votado, con el 48.4 por ciento de los sufragios, y el actual mandatario lo secundó con el 43.2 por ciento.
También se eligió a los gobernadores de doce estados, incluidos el más poblado, Sao Paulo, así como Amazonas y Bahía, en el noreste.
Las urnas cerraron a las 17:00 horas en todo el país. Debido a que la votación se lleva a cabo electrónicamente, los resultados iniciales se publican rápidamente y los escrutinios finales suelen estar disponibles unas horas más tarde.
Bolsonaro había liderado durante la primera mitad del conteo y, tan pronto como Da Silva lo rebasó, los autos en las calles del centro de Sao Paulo comenzaron a tocar la bocina.
Se podía escuchar a la gente en las calles del barrio de Ipanema de Río de Janeiro gritando: "¡Se volvió!"