La pandemia de COVID-19 continúa asolando al mundo, y las vacunas de diversos laboratorios han sido autorizados para contrarrestar una enfermedad grave contra el SARS-CoV-2. Los ensayos clínicos sugieren que la vacuna Moderna protege a los adultos de manera eficaz y segura contra el virus y sus complicaciones.
Moderna es una empresa estadounidense de biotecnología y farmacéutica que investiga y desarrolla medicamentos. Su vacuna contra el coronavirus también se conoce como mRNA-1273. Es una de las vacunas disponibles actualmente para proteger a las personas contra COVID-19. Pero ¿cuál es su efectividad.
La semana pasada, Moderna informó que su vacuna mantiene una efectividad del 93 por ciento seis meses después de la segunda inyección. Un análisis de la compañía sugiere que la protección de la vacuna permanece estable por mucho tiempo después de que los receptores completan el régimen estándar de dos dosis
Asimismo, estudios recientes han encontrado que la vacuna COVID-19 de Moderna es efectiva contra varias variantes preocupantes, dijo la firma estadounidense, que aseguró que han encontrado que la vacuna tiene un efecto neutralizante contra todas las variantes de coronavirus probadas, incluidas las variantes Beta, Delta y Kappa.
Moderna está explorando opciones para inyecciones complementarias que podrían atacar las cepas emergentes del virus SARS-CoV-2. Los tres candidatos de refuerzo produjeron “respuestas sólidas de anticuerpos” contra Delta y otras variantes de preocupación en un estudio en humanos de fase 2, dijo Moderna en su comunicado.
La vacuna Moderna COVID-19 está compuesta de ácido ribonucleico mensajero (ARNm), lípidos SM-102, polietilenglicol (PEG) 2000 dimiristoil glicerol y 1.2-diestearoil-sn-glicero-3-fosfocolina, así como trometamina y clorhidrato de trometamina, entre otros.
Las vacunas de ARNm, como la de Moderna, envían el código genético a nuestras células para producir una proteína que desencadena la respuesta inmunitaria del cuerpo. Luego, el cuerpo produce anticuerpos y desarrolla una inmunidad más duradera que puede combatir el virus SARS-CoV-2 en caso de que ingrese al cuerpo en una etapa posterior.
Los profesionales de la salud administran la vacuna en dos dosis separadas. La primera en forma de inyección en la parte superior del brazo, y se administra la segunda dosis 28 días después de la primera.
Los posibles efectos secundarios son dolor, enrojecimiento e hinchazón en el brazo, donde recibió la inyección. También tiene efectos en el resto de tu cuerpo: cansancio, dolor de cabeza, dolor muscular, escalofríos, fiebre y náusea, de acuerdo con el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Los efectos adversos son normales, debido a que el sistema inmunológico está elaborando anticuerpos, pero desaparecen en unos días, ya que el organismo está generando inmunidad contra el coronavirus, proceso que tarda alrededor dedos semanas tras la inoculación