El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó la muerte de Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshi, quien es identificado como líder de ISIS, en la operación antiterrorista lanzada en el noroeste de Siria, la noche del miércoles 2 de febrero.
En un comunicado, Biden destacó que "anoche, bajo mi dirección, las fuerzas militares estadounidenses en el noroeste de Siria llevaron a cabo con éxito una operación antiterrorista...gracias a la habilidad y valentía de nuestras Fuerzas Armadas, logramos retirar del campo de batalla a Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshi".
El mandatario estadounidense agregó que todos los elementos de las Fuerzas Armadas estadounidenses que participaron en la operación regresaron sanos y salvos.
El gobierno de Estados Unidos detalló que el líder terrorista se hizo explotar durante el operativo, con una bomba que llevaba consigo, por lo que Biden consideró que fue un “acto de desesperada cobardía”.
Según los informes de inteligencia de las autoridades de Estados Unidos, Al Quraishi asumió el cargo al frente de ISIS tras la muerte del anterior jefe del grupo yihadista, Abu Bakr al Baghdadi, en una operación similar llevada a cabo en octubre de 2019 por las fuerzas especiales en la provincia de Idlib, cerca de la frontera con Turquía.
LA OPERACIÓN
El gobierno de Biden detalló que para la operación en la que el líder terrorista murió, los militares aterrizaron en helicóptero cerca de campamentos de desplazados en la ciudad de Atme, en la región de Idlib, controlada en gran parte por grupos yihadistas y rebeldes, afirmó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), que cuenta con una amplia red de fuentes en Siria, país devastado por la guerra.
Antes de conocerse el resultado de la operación, el director del OSDH, Rami Abdel Rahman, indicó que se trata de la mayor operación de las fuerzas estadounidenses en Siria desde la muerte en octubre de 2019 de Abu Bakr Al Baghdadi.
Con información de AP.