La refinería de Dos Bocas es el megaproyecto que llevará al país a la ‘autosuficiencia energética’, asegura Andrés Manuel López Obrador. Esta obra prioritaria del presidente será inaugurada este 1 de julio en medio de cuestionamientos sobre la opacidad en el manejo de recursos, el elevado costo y la poca viabilidad de la meta trazada por la 4T para la refinación de combustibles.
Esta megaconstrucción tendrá 17 plantas de proceso, 57 tanques y 34 esferas de almacenamiento, sin embargo, expertos consultados por Nación 321 aseguran que todo eso será insuficiente para cumplir la promesa de la autosuficiencia energética en 2023, además de que va en sentido contrario a las tendencias mundiales de los principales productores de petróleo y de energías en el mundo.
Los problemas existen desde el inicio: Dos Bocas nació en la oscuridad, dice Rosanety Barrios, experta independiente en el sector energético, pues nunca se inscribió como un proyecto de infraestructura como establece la ley. Pese a esto, recibió recursos desde el 2019 y nunca difundió los análisis costo-beneficios que sustentaron su creación.
“Es una instalación brutalmente cara, con una opacidad alarmante, no hay forma de saber cuál es el grado de avance en la refinería, cuánto cuesta o va a costar, eso me parece grave”, expuso.
Bloomberg reportó esta semana que el costo de la refinería podría llegar a los 18 mil millones de dólares, es decir, 125 por ciento más de lo que se proyectó, toda vez que, inicialmente, se estimaban 8 mil millones de dólares.
El especialista Gonzalo Monroy, consultor de la empresa especializada GMEC, aseguró en entrevista que los sobrecostos de la obra, la asignación directa de contratos y el uso de filiales de Pemex para dificultar la rendición de cuentas en Dos Bocas confirma que la obra se construye como un “monumento a la opacidad” que obedece a dictámenes políticos y no técnicos.
“El gobierno para agregar más capas de opacidad utilizó filiales de Pemex en las cuales no es tan fácil obtener su evaluación o incluso supervisión desde el punto de vista de cuentas públicas, no es tan sencillo”, expresó.
En diferentes momentos, López Obrador ha mencionado que la apuesta con Dos Bocas y las otras seis refinerías que hay en México es reducir la importación de combustibles, que actualmente representa cerca del 77 por ciento del abastecimiento en el país.
Para ello, estima que la producción de 340 mil barriles diarios en Dos Bocas permita generar gasolinas y diésel, sin embargo, los expertos no son tan optimistas al asegurar que la meta presidencial se queda corta y que no hay forma de lograrlo, tomando en cuenta el estado en el que actualmente operan las refinerías.
NO HABRÁ AUTOSUFICIENCIA
Susana Cazorla, exjefa de asesores para en la presidencia de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), precisó que la demanda de gasolinas no se cubrirá con la puesta en marcha de Dos Bocas porque México no cuenta con suficiente crudo para procesar.
“No da ni operando las seis refinerías a la capacidad máxima a la que dice que van a operar, ni así se satisface la demanda que, además, es un objetivo que no tiene una racionalidad económica, es una necesidad ideológica. Deberíamos estar viendo cómo transitar a vehículos eléctricos o híbridos”, explicó la directora y fundadora de SICEnrgy.
Por su parte, Rosanety Barrios sumó dos agravantes por que las que difícilmente se alcanzará la independencia de gasolinas extranjeras: la baja producción de Pemex y su capacidad para refinar únicamente 800 mil barriles diarios; así como los subsidios a combustibles.
"No tenemos suficiente petróleo no solamente para Dos Bocas sino para todas las refinerías. Pemex tiene una producción estancada... Es insuficiente para tener una autosuficiencia en materia de petrolíferos", detalló.
Sobre los costos de las gasolinas, Gonzalo Monroy explicó que los precios se fijan a nivel internacional y la única forma de mantenerlos por debajo de ese nivel es vía subsidios, como ha ocurrido hasta la fecha, aunque coinciden que no es lo más recomendable.
"No es una lógica energética, es un proyecto político. Me atrevo a decir que es el legado más grande que va a tener el presidente: una refinería", dijo.
DEER PARK, MEJOR NEGOCIO QUE DOS BOCAS
En contraparte, los expertos respaldaron la adquisición de Deer Park sobre la construcción de la refinería Dos Bocas y afirmaron que ha sido, por mucho, uno de los mejores negocios de Pemex.
"Ya estaba operando, todo el equipo que era de Shell se quedó, no tuvieron que encontrar el hilo negro para saber cómo hacerla funcionar. Es una de las plantas más importantes de la costa", mencionó Gonzalo Monroy.
Deer Park fue adquirida por Pemex en 2021 en una transacción de 596 millones de dólares. La refinería tiene una capacidad para procesar 320 mil barriles diarios de gasolina, cifra similar a la que se proyecta para Dos Bocas aunque esta última comenzaría a operar hasta el 2026, según un estudio publicado por el periódico Reforma, aunque Rocío Nahle y el propio AMLO han descartado esa versión.
Aunado a los expertos, un análisis elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) sobre la viabilidad del proyecto estima que la obra no resolverá el problema de autosuficiencia y podría agudizar las pérdidas económicas de Pemex, quien no cuenta con un papel preponderante en el mercado de refinación.
Según el IMCO, Pemex Transformación Industrial (PTRI), subsidiaria encargada del negocio de refinación, ha reportado pérdidas acumuladas por 1.28 billones de pesos entre 2011 y 2021. La empresa es la única de las subsidiarias de Pemex que reportó números negativos en el último año, incluso, habría gastado más en insumos para producir gasolinas, diésel, entre otros.
"Los sobrecostos reconocidos, las pérdidas de Pemex en refinación y las condiciones del mercado confirman que "la nueva refinería no abona a un sector energético más competitivo en México", concluyó.