Porque el sustituto de Chong tendrá menos de un año para arreglar estos problemas
El año más violento del que se tiene registro en México, la desaparición de un grupo de estudiantes y una coordinación poco eficaz entre los gobiernos estatales para mejorar la seguridad pública, son algunos de los pendientes que deja Miguel Ángel Osorio Chong, quien anunció su renuncia como secretario de Gobernación (Segob) este miércoles.
Aquí te dejamos, uno a uno, lo que Chong le dejará a su sucesor.
VIOLENCIA RÉCORD
2017 quedará en la historia de México como el año más violento del que se tiene registro.
Si bien se ha señalado al sexenio de Felipe Calderón como uno de los periodos de mayor violencia en México, con un récord de homicidios dolosos en 2011 (22 mil 409 en los 12 meses), el año pasado se superó esa cifra, aún con los datos pendientes de diciembre.
De acuerdo con información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, a noviembre de 2017 se tenían registrados 23 mil 101 casos de homicidios dolosos, un promedio de 2 mil 100 casos por mes, 70 por día.
Hay que recordar que la Secretaría de Gobernación es la dependencia federal encargada de garantizar la seguridad de los mexicanos, de acuerdo con la descripción de sus atribuciones en su portal oficial.
"Contribuir a la gobernabilidad democrática, a la paz pública y al desarrollo político (...) para garantizar la unidad y seguridad nacionales, la convivencia armónica y el bienestar de las mexicanas y los mexicanos en un Estado de Derecho"
AYOTZINAPA
La noche del 26 de septiembre de 2014, 43 estudiantes normalistas desaparecieron en Iguala, Guerrero. Este hecho es uno de los capítulos más negros en la historia del país.
Se trató de alumnos de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos, de Ayotzinapa, quienes fueron presuntamente secuestrados y asesinados por policías municipales, por supuestas órdenes de José Luis Abarca, entonces alcalde de Iguala. Todo esto, supuestamente, con ayuda o cooperación del Ejército.
Las autoridades federales señalaron que los restos de los jóvenes fueron incinerados en un basurero de Cocula, Guerrero, y posteriormente arrojados al río San Juan.
Sin embargo, los padres de los jóvenes discreparon de la versión oficial, por lo que intervino el Grupo Internacional de Expertos Independientes (GIEI), el cual ha encontrado diversas irregularidades en la investigación del gobierno federal y su "verdad histórica" del caso.
La investigación ha corrido a cargo de la Procuraduría General de la República (PGR), pero es la Secretaría de Gobernación (Segob), en donde Chong fue su titular, la encargada de garantizar la seguridad de los mexicanos.
FALTA DE COORDINACIÓN
El 16 de octubre de 2017, Osorio Chong aseguró que el repunte de violencia e inseguridad que hay en México se debe a la debilidad de las instituciones locales de seguridad pública, evidenciando la molestia del titular de Segob con algunos mandatarios locales.
Al participar en el Foro 'Impulsando a México', organizado por El Financiero Bloomberg, el entonces encargado de la política interior del país dijo que desde el inicio del sexenio de Enrique Peña Nieto se trabajó en una estrategia de colaboración para brindar más seguridad a los mexicanos y la estrategia funcionó con base en la coordinación de trabajo hasta que se comenzaron a renovar los gobiernos estatales y municipales, con las elecciones de 2015.
"Desde entonces se han renovado 22 gubernaturas y un 75% de los municipios, y por supuesto que los gobernantes llegan con otras ideas y actitudes diferentes por lo que se nos vino un problema de seguridad pública que llegó a niveles de 2011, por eso digo que tenemos que formar instituciones fuertes que estén por encima de los periodos de gobierno, de las ideologías o de los nombres", comentó Osorio Chong.
“No podemos enfrentar a delincuentes del siglo XXI con recursos del siglo XX” dijo @osoriochong en el Foro #ImpulsandoaMexico pic.twitter.com/iwsQ8oXJoa
— Carlos Bonilla (@CarlosBonillaMx) 16 de octubre de 2017
El entonces secretario de Gobernación dijo que el gobierno que encabeza Enrique Peña Nieto no es una administración que guste de repartir culpas, pero sí es necesario que los gobiernos municipales y estatales se comprometan a tener corporaciones de seguridad públicas más preparadas.