Porque nuevamente Calderón y López Obrador se enfrascan en guerra de declaraciones
El presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó este viernes al canciller Marcelo Ebrard enviar una nota diplomática al Gobierno de Estados Unidos para pedir información sobre el operativo 'Rápido y Furioso', en relación a declaraciones del exmandatario Felipe Calderón.
El presidente afirmó que se trata de un caso delicado debido a que se reconoció la intromisión ilegal de un gobierno extranjero.
"Estamos ante un caso delicadísimo porque se está reconociendo que hubo una intromisión ilegal, violatoria de nuestra soberanía, por un gobierno extranjero, en el caso de que no existiera cooperación. Entonces si ya sabemos esto, de parte del expresidente, pues vamos a mandar una nota diplomática al Gobierno de EU. Queremos informe sobre este caso, que informe el Departamento de Justicia", comentó.
En tanto, el canciller Marcelo Ebrard, que acompañó al presidente en la conferencia matutina, comentó que seguirá esta instrucción y enviará la nota diplomática este mismo día al Departamento de Estado de EU y que, debido a la buena relación entre los países, no veía inconvenientes ni obstáculos para la cooperación.
AMLO añadió que no podía callarse este caso de intervención para que nunca jamás vuelva a ocurrir una acción de este tipo, y destacó que el actual mandatario estadounidense, Donald Trump, ha ofrecido ayuda a México en otros casos durante este sexenio, pero que ante la negativa del país, ha respetado la decisión.
El jueves, Calderón indicó a través de su cuenta de Twitter que era falso que el Gobierno de México tuviera un acuerdo con la administración estadounidense durante su sexenio para introducir armas al país. Señaló que entre 2006 y 2012 se exigió a EU que detuviera el tráfico de armas que llegaban a los criminales; la administración estadounidense ofreció tomar acciones y su procuraduría buscó recolectar evidencia sobre esto.
"Es en ese marco que, según se supo después, introdujeron detectores electrónicos en armas comercializadas en la frontera para rastrear su movimiento y actuar judicialmente contra los culpables. Sin embargo, la situación salió de control de las autoridades estadounidenses.
"La llamada operación 'Rápido y Furioso' fue operativo secreto, cuya implementación y resultados fueron revelados a agencias mexicanas en la medida en que fueron del conocimiento público resultados negativos no deseados por sus autores en el Departamento de Justicia", apuntó el exmandatario.