El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, confirmó la renuncia de la fiscal de Sinaloa, Sara Bruna Quiñonez, quien este viernes dejó su puesto en medio de los señalamientos de la Fiscalía General de la República (FGR) por las irregularidades en la carpeta de investigación del asesinato de Héctor Cuén, exrector de la Universidad estatal.
A través de su cuenta de X, el mandatario indicó: "Reconozco la decisión responsable de la Señora Fiscal General del Estado de Sinaloa, licenciada Sara Bruna Quiñonez, al presentar ante el Congreso de Sinaloa su renuncia voluntaria al cargo".
Añadió: "Sé que lo hace honrando la honorabilidad que le caracteriza, para que se atiendan a plenitud las observaciones que la FGE ha formulado, en relación a la investigación del caso del homicidio del ex rector Héctor Cuén".
CASO CUÉN:
Este jueves, la Fiscalía General de la República (FGR) reveló que atrajo la investigación del asesinato de Héctor Cuén, exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), y encontró inconsistencias en la indagatoria que llevaba la Fiscalía estatal.
A través de sus redes sociales, la dependencia destacó que, "con respecto al homicidio de Héctor 'N', la FGR obtuvo copia autenticada de la carpeta de investigación local de Sinaloa; peritos y analistas de @FGR_AIC reportan:"
"El cuerpo tiene un fuerte hematoma en la cabeza, recibió cuatro disparos en las piernas. El video de la gasolinera tiene sonido y sólo se escucha un disparo. Los tres empleados de la gasolinera no refieren haber escuchado disparos. Entre otros datos", enunció.
Destacó que en la carpeta de investigación "no se identifica con precisión la fisionomía de los ocupantes de la camioneta, no hay mecánica de hechos del evento, no se procesó criminalísticamente el lugar de los hechos, ni el vehículo".
La dependencia federal añadió que ·habiendo manchas de sangre humana en la batea de la camioneta, no hay ni peritajes, ni determinaciones al respecto", además indicó que "tampoco se cumplieron, por parte de todas las autoridades involucradas, las medidas de preservación del cuerpo, permitiéndose una incineración que es contraria a las prácticas criminalísticas sobre investigación de homicidios", lo que contraviene a los procesos legales sobre un caso de homicidio como este.