CHIAPAS.- Elementos del Ejército Mexicano dispararon contra el guatemalteco Elvin Mazariegos Pérez, quien había cruzado la frontera para comprar mercancía y regresaba a su país cuando fue atacado por los militares. Los hechos ocurrieron a la altura de la comunidad Bacantón, municipio de Mazapa de Madero.
Elvin Mazariegos habitaba en el poblado La Esperanza, Departamento de San Marcos, colindante con México; de acuerdo con sus familiares, la mañana de este lunes había cruzado la frontera para comprar mercancía en México, como lo hacen habitantes de ambos países, quienes intercambian productos.
Alrededor de las 13:00 horas, regresaba a bordo de una camioneta color gris, cuando fue interceptado por soldados del XV Regimiento de Caballería Motorizada, quienes le exigieron presentara su Tarjeta de Visitante Regional.
Familiares de Elvin Mazariegos explicaron que ellos no portan ese documento, porque nunca lo han necesitado, ya que no existe una frontera entre La Esperanza, Guatemala, y el municipio chiapaneco Mazapa de Madero.
"Nuestros padres, abuelos, los padres de nuestros abuelos, y nosotros, hemos intercambiado productos, hemos emparentado, y tenemos una vida en común con los mexicanos, mi hermano le dijo eso a los soldados, y en respuesta ellos dispararon”, dijo Guadalupe, quien se identificó como hermano del guatemalteco asesinado.
El cuerpo de Elvin Mazariegos quedó en el asiento del copiloto. Recibió dos disparos que entraron por la parte trasera de la camioneta en la que viajaba en compañía de otra persona.
De acuerdo a los militares, Elvin y su acompañante se negaron a identificarse, manifestaron una actitud amenazante, y arrancaron el vehículo en el que viajaban.
Al escuchar los disparos, habitantes de La Esperanza acudieron al lugar, y al ver a su connacional muerto, reclamaron a los militares y detuvieron a ocho de ellos, a quienes llevaron a su poblado.
Sobre el camino quedó la camioneta de Elvin Mazariegos, el vehículo en el que viajaban los militares, así como sus armas y pertrechos. Hasta esta noche, las autoridades mexicanas no han logrado la liberación de los soldados.
La presencia de militares en la frontera sur de México se incrementó en días recientes, ante los acuerdos con Estados Unidos para limitar la migración centroamericana. Elementos de la Sedena, Guardia Nacional, Marina, y del Instituto Nacional de Migración (INM), han hecho despliegues en al menos cuatro ciudades fronterizas.
La participación de las fuerzas armadas en acciones de contención migratoria y seguridad interior ha sido cuestionada por organizaciones no gubernamentales de México y otros países, quienes han señalado que las fuerzas armadas tienen un uso desproporcionado de la fuerza, porque están entrenadas para situaciones de combate para abatir a un enemigo armado, y no para labores de seguridad con la población civil.