Con importante despliegue de guardaespaldas, la mañana de este viernes, el fiscal General de Justicia del Estado de México, José Luis Cervantes Martínez, acudió a Palacio de gobierno a la mesa diaria de Coordinación para la Construcción de la Paz, que encabeza la gobernadora mexiquense, Delfina Gómez Álvarez.
Sobre la calle de Sebastián Lerdo de Tejada, arribó en motocicleta la avanzada del cuerpo de seguridad del fiscal, enseguida, de una unidad blindada descendió el funcionario que horas antes fuese agredido a balazos en su equipo de seguridad.
Vestido con ropa oscura, con un guarura en cada costado, portando un teléfono celular en su mano derecha y a paso de prisa, Cervantes Martínez solo expresó que tenía una reunión, “tengo una reunión”, a la par de que uno de sus guardaespaldas exclamaba, “¡permítame el paso por favor!, ¡permítame el paso!”.
Una vez que el fiscal General de Justicia del Estado de México ingresó a Palacio de gobierno, en Toluca, por uno de los accesos laterales, éste quedó sellado por al menos tres guaruras de José Luis Cervantes, fuertemente armados.
De manera usual, la mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz se conforma por la mandataria mexiquense, acompañada por el Secretario General de gobierno, Horacio Duarte Olivares y el Secretario de Seguridad del Estado de México, Andrés Andrade Téllez, así como altos mandos de la milicia mexicana y de la Guardia Nacional (GN).
NO FUE UN ATAQUE DIRECTO
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México informó la tarde de este viernes, que, Julio César, sujeto detenido por haber disparado y embestido contra del convoy del Fiscal, no actuó de forma dirigida hacia Cervantes Martínez, aunque sí iba bajo los influjos del alcohol.
En la unidad marca Jeep, se le requisó al agresor un fusil con tres casquillos útiles y tres ojivas percutidas, una chamarra táctica, una cangurera con bolsas de droga y credenciales falsas, entre otros elementos.
ASÍ INICIÓ LA BALACERA
La tarde de ayer, sobre el municipio de Ocoyoacac, Julio César, quien viajaba en una camioneta marca Jeep, modelo 2011 y placas del Estado de México, comenzó a acercarse al convoy del Fiscal, lo que llegó hasta la bifurcación de las casetas de cobro hacia la Ciudad de México y La Venta-Naucalpan.
Las llamadas de atención por parte de los guardaespaldas de José Luis Cervantes no fueron suficientes y el hoy detenido trató de impactar el vehículo oficial contra una valla de seguridad que da al vacío, por lo que uno de los escoltas le enseño, a Julio César, el arma de cargo, lo que derivó que el sujeto impactara en varias ocasiones el carro de la corporación policíaca.
Ante esta conducta del agresor, la avanzada del fiscal disparó a las llantas de la camioneta Jeep, ante lo cual, Julio César exhibió su arma de alto poder, mientras que los escoltas del Fiscal balearon también el motor de la camioneta de Julio César.
Una vez que fue rodeado por el cuerpo de seguridad del Fiscal, 31 disparos dieron blanco en la parrilla, motor y llantas traseras de la unidad Jeep para impedir que Julio César huyera, por lo que se logró su captura.
En el sitio de la agresión a balazos quedó herido un guardaespaldas del fiscal General de Justicia del Estado de México, quien fue hospitalizado y se recupera.