Porque el INE multó al Bronco con una sanción de 253 mil 570 pesos por diversas irregularidades
Los mexicanos tendrán otra opción más para elegir presidente de México, luego de que este lunes el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó al Instituto Nacional Electoral (INE) que valide los apoyos para la candidatura de Jaime Rodríguez Calderón, el Bronco y lo registre en la contienda.
La Sala Superior resolvió los juicios para la protección de los derechos político-electorales que presentó el gobernador con licencia de Nuevo León, en los que impugnó el dictamen del INE que le negaba el registro de la candidatura por cometer diversas irregularidades.
Estas fueron las razones por las que el INE decidió no darle al Bronco el registro para una candidatura presidencial, pero que el Tribunal Electoral pasó por alto.
FIRMAS ¿INSUFICIENTES?
Para empezar, ni alcanzó las firmas. El INE dictaminó, el pasado 24 de marzo, que Jaime Rodríguez Calderón logró recabar 849 mil 937 firmas válidas para su candidatura presidencial, unas 16 mil 656 menos que las necesarias para lograr su registro (866 mil 593).
Pero no la tuvo tan fácil, pues durante cinco días, el INE y el grupo de trabajo del Bronco revisaron 388 mil 329 apoyos clasificados como inválidos, de los cuales el gobernador con licencia de Nuevo León recuperó 14 mil 428 registros. ¿Y las otras dos mil?
¿QUIÉN 'POMPÓ'?
En la búsqueda por las firmas necesarias para lograr su candidatura, el Bronco cometió algunas irregularidades en lo que refiere a los recursos con los que buscó los apoyos ciudadanos. Para ser más claros, no sabemos de dónde salieron los dineros.
Según el INE, el Bronco utilizó 17 millones de pesos durante la etapa del registro de apoyos de los que se desconoce su origen, por ello, el INE le impuso un castigo económico por 253 mil 570 pesos.
De acuerdo con el INE, se detectaron depósitos a la cuenta de una asociación civil de Jaime Rodríguez Calderón a través de cheques de caja sin que se pudiera conocer el origen de la aportación.
Además, cuando la Unidad Técnica de Fiscalización del INE investigó los depósitos realizados al Bronco, identificó que en las cuentas bancarias de quienes aportaron recursos al candidato, habían caído depósitos inmediatamente antes de hacer los donativos por importes idénticos a los que luego aportaron.¿Bastante extraño no?
En ese caso, se detectó que el gobernador con licencia inyectó el dinero de dos empresas mercantiles.
¿ENGAÑOS?
De acuerdo con una investigación de Reforma, publicada el pasado 19 de febrero, el Bronco recabó firmas mediante engaños.
Para probarlo, el diario infiltró a dos de sus periodistas como auxiliares en el distrito 10 de San Nicolás y descubrieron que a las personas se les pedía la firma para Raúl González, aspirante que va por el Senado; y por Valentina Treviño, precandidata a una diputación federal.
Sin embargo, a la mera hora, los auxiliares debían sumar ese apoyo a la candidatura presidencial del gobernador con licencia de Nuevo León.
Para que no se diera cuenta la persona engañada, el auxiliar primero marcaba la casilla del presidenciable y luego la del otro aspirante, de esta manera cuando el ciudadano firmaba, no se daba cuenta que le daba su apoyo a otra persona.
Incluso dicen que los auxiliares dejaron de portar el chaleco que los distinguía y el gafete del Bronco; además, cobraban mil 500 pesos semanales por recabar las firmas.
Los periodistas infiltrados no falsificaron firmas y todavía poseen los pagos por el trabajo de auxiliar, los cuales están en disposición de las autoridades correspondientes, de acuerdo con Reforma.
Pese a todas estas irregularidades, el Tribunal decidió que los derechos electorales del Bronco fueron violados porque el INE no dio derecho de audiencia a Jaime Rodríguez para que pudiera aclarar todas las "travesuras" detectadas por la autoridad electoral.