Desde que era niño, a Santiago Taboada siempre le apasionó el futbol, pero hoy su cancha favorita es la política, y desde ahí busca darle ‘tarjeta roja’ a la desigualdad… y también al partido que gobierna el país y su capital: Morena.
Pambolero y chilango, como se define, el hoy dos veces alcalde de Benito Juárez quiere ser jefe de Gobierno de la Ciudad de México y aunque en la cancha política se considera un buen centrocampista, asegura que las mejores jugadas son en equipo.
Hasta ahora, el panista mantiene un buen historial en números, pues no sólo se encuentra entre los alcaldes mejor calificados del país, sino que en 2021, cuando se reeligió en la Benito Juárez, lo hizo con un respaldo arrasador, convirtiéndose en el alcalde con mayor porcentaje de sufragios en todo México.
Asimismo, según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de la ONU, su demarcación es una de las dos con mejor calidad de vida en el centro del país, en un estatus equiparable a Suiza.
El equipo de Taboada ha hecho buenas jugadas, pues su terruño es la alcaldía con mayor percepción de seguridad en la CDMX, según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública del INEGI.
“Cuando me reelegí obtuve más votos que cuando llegué, y fue gracias al trabajo conjunto. Yo creo que esto es como el futbol: puedes ser el mejor centro delantero, pero si tú no tienes un buen portero, un buen lateral, un medio con tensión, no eres campeón del mundo. Hoy se piensa que una sola persona puede resolver los problemas, cuando lo que es importante es tener un buen equipo”, dice Taboada en entrevista con Nación 321.
De cara al 2024, el panista confía en que su experiencia le permitirá dejar fuera del terreno de juego a su principal rival, que no es un partido político ni una figura, sino un mal que aqueja a la ciudadanía: la desigualdad.
“El gran reto es reducir las desigualdades, me parece que no puede seguir ocurriendo que, dependiendo del lugar en el que vivas, son las condiciones, circunstancias y oportunidades que puedas tener. Yo no creo que el lugar donde vivas o nazcas tiene que determinar si vas a salir adelante o no”, apunta.
Santiago busca convertirse en el jefe de Gobierno más joven en la historia de la CDMX y el primero emanado del Partido Acción Nacional (PAN), pero arropado por el Frente Amplio por México (PAN, PRI, PRD y organizaciones civiles).
De una cuna que no tiene nada que ver con la política, Taboada nació en la Ciudad de México en octubre de 1985 y hoy tiene 37 años, casi 38. Sus primeros recuerdos son en Coyoacán, donde vivió muy cerca de las instalaciones del Club América, escuadra rival de su equipo, Los Pumas.
“Siempre me apasionó mucho el futbol, toda mi familia estábamos metidos (...) uno de los momentos más felices de mi niñez fue mi foto con Hugo Sánchez, en el Mundial del 94; tuvimos que hacer una fila de cinco horas, pero para mí fue lo más divertido”, narra.
Con el paso de los años, el panista explica que él y su familia se tuvieron que mudar a la colonia Narvarte. En esa misma época ingresó a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde estudió Derecho, aunque en él había una ‘espinita’ oculta.
“Siempre tuve la inquietud de enterarme de las cosas de la política. Yo estaba chavo, pero recuerdo muy bien el debate presidencial del 94, no es algo que a cualquier niño le interesa”, platica.
Además del futbol y el derecho, Santiago descubrió, hace unos 20 años, otra de sus grandes pasiones: la política.
“Cuando estaba estudiando, hice trabajo social en la sierra de Puebla durante tres años. Ahí me di cuenta del contraste de las muchas realidades, que pensar en una escuela o en salir adelante se puede ver como algo muy lejano, aunque la gente tenga mucho ánimo de superarse. Hoy por eso estoy aquí, porque el gran reto es reducir las desigualdades”, compartió en entrevista.
En su juventud, Santiago Taboada trabajó en la farmacia de su abuelo, en la colonia Guerrero, además de ser entrenador de futbol infantil.
La vida le cambió cuando, por iniciativa propia, tocó las puertas del PAN. Tenía 18 años de edad y desde entonces, su camiseta ha sido la blanquiazul.
“La prepa en la que estudiaba estaba muy cerca del PAN y un día llegué al Comité y literal toqué la puerta. Nadie de mi familia ha estado en esto, no tengo ningún tipo de antecedente político: mi papá es contador público, mi mamá es maestra de kínder”, platica.
A Taboada le fue tan bien que en 2009 se convirtió en líder juvenil del PAN y tres años después, llegó como diputado local de la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Después, el menor de cuatro hermanos de la familia Taboada Cortina, fungió como diputado Constituyente de la Ciudad de México y legislador local. En 2018 llegó al frente de la alcaldía Benito Juárez.
Al haber vivido más de la mitad de su vida dentro de la política, el panista afirma que combinar su pasión con la vida familiar ha sido todo un reto, pero en ningún momento ha descuidado su paternidad.
“Yo no lo veo como una especie de sacrificio, es algo que llevo haciendo durante 20 años de mi vida y que me apasiona. Les quiero dejar a mis hijos la idea de que las cosas que hagas, sean con muchísima pasión”, dice.
Hoy, la familia de Santiago Taboada está integrada por sus dos hijos, además de sus tres perritos. Sobre su vida amorosa, el alcalde está actualmente divorciado, pero tiene una relación sentimental con Fernanda Chávez.
Al hablar de su éxito como alcalde de Benito Juárez, Taboada explica que una de las bases de su gestión ha sido no deslindarse de responsabilidades.
Por ejemplo, narra, cuando el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador decidió eliminar programas como las estancias infantiles o el Seguro Popular, y él optó por llenar los vacíos que se quedaron, antes que buscar confrontación.
“No sólo se trata de ser oposición (...) Los alcaldes tenemos que abonar y hacernos responsables, porque es muy fácil decir ‘no me toca’, pero por ejemplo. en el tema de seguridad tenemos una responsabilidad, que si bien no es jurídica, es social”, añade.
Precisamente sobre Morena y sus cuadros, que hoy gobiernan el país y la CDMX, el panista afirma que lo han querido demeritar en más de una ocasión, pero eso no lo intimida.
“Yo sí puedo presumir algo que ‘enfrente’ no [en Morena]: los resultados. En esta Ciudad, donde más del 70% se siente insegura o ha sido víctima de delitos, tenemos que en Benito Juárez es al revés (...) me he parado en la calle y la gente me dice ‘me siento más segura aquí que cuando voy a trabajar’ o ‘me siento más seguro aquí, cuando chambeo, que cuando me regreso a mi casa’. Para mí, hechos son amores y no buenas razones”, sentencia.
En el sueño por lograr la candidatura a la CDMX por el Frente Amplio, Santiago ha tenido que librar varias críticas del partido en el poder.
En julio pasado, López Obrador acusó una simulación en el Frente y afirmó que la oposición ya tenía definidos sus perfiles a la Presidencia, así como la jefatura de Gobierno: Xóchitl Gálvez y Santiago Taboada.
En este contexto, Taboada responde al ‘destape’ del mandatario y afirma que aunque no necesita que ese ‘director técnico’ le levante la mano, es cierto que hasta López Obrador sabe que él es la mejor opción.
“Por supuesto que quiero encabezar el Frente, tengo los números y las cartas credenciales. Hemos aguantado las críticas. Yo creo que el Presidente tiene una obsesión conmigo y es un poco mal agradecido, porque vivió en Benito Juárez, una alcaldía en la que incluso dijo que siempre estuvo muy bien”, considera.
Asimismo, sobre los señalamientos en su contra por su presunta relación con el ‘Cártel Inmobiliario’ de la alcaldía Benito Juárez, que según la Fiscalía de la Ciudad de México se ha dedicado en tiempos recientes a la extorsión y desalojos violentos en viviendas, el panista dice no temer, e incluso delega responsabilidades “a los de enfrente”.
“Llevan un año investigando, no han encontrado nada y no van a encontrar, si hay un cártel inmobiliario, está en el Palacio del Ayuntamiento, porque en esta Ciudad no se puede poner un ladrillo sin que lo autorice el Gobierno capitalino”, sentencia.
Al final, Santiago asevera que, al quererle poner el pie, los morenistas le han hecho un favor.
“No hay candidato en esta Ciudad a quien hayan investigado más que a mí. Por eso yo estoy tranquilo y por eso estoy aquí, porque nada, absolutamente nada de lo que han dicho, me lo han podido comprobar”, asegura.