Porque aunque no lo creas, el círculo cercano de cada político nos puede dar pistas de sus planes a futuro
Estos políticos se han agarrado del chongo varias veces, pero antes de ser enemigos posaron muy alegres para la foto, porque en la política, ante todo, está la diplomacia y las buenas maneras.
Acá te dejamos las imágenes que seguramente estos políticos desearían desaparecer.
1. AMLO Y FOX
Entre estos dos políticos han existido un sin fin de descalificaciones, amenazas, insultos y hasta un juicio de desafuero, pero como ambos tenían que convivir y compartir escenario, no les quedó de otra que saludarse muy amablemente en esta foto tomada cuando Andrés Manuel López Obrador era jefe de Gobierno y Vicente Fox, presidente de México.
López Obrador ha dicho que Vicente Fox fue parte de la "mafia del poder" que cometió fraude electoral en las elecciones de 2006 para favorecer a Felipe Calderón, en ese entonces abanderado del PAN a la Presidencia. Además, prometió que si llega a la Presidencia, se encargará de que se quede sin su pensión de expresidente.
En tanto, Fox, ha dicho que el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México representa el populismo y la demagogia; y él personalmente se encargará de que el tabasqueño no gane las elecciones de 2018.
2. AMLO Y CALDERÓN
"Mentiroso", "mezquino", "priista", "espurio", "pelele", "títere". Estos son los adjetivos calificativos que se han dicho Felipe Calderón Hinojosa y Andrés Manuel López Obrador han marcado una época en la política mexicana y han atizado la rivalidad entre estos dos políticos.
Pero un momento... ¡claro que ambos tienen una foto juntos! Aquí te dejamos la imagen que data de principios del milenio.
¿Alguna vez los volveremos a ver tan cerca uno del otro?
3. MARCELO EBRARD Y FELIPE CALDERÓN
Cuando Marcelo Ebrard asumió como jefe de Gobierno, el 5 de diciembre de 2006, estaba en su punto el tema del fraude electoral y la derrota de Andrés Manuel López Obrador frente a Felipe Calderón, por ello, en su discurso de toma de protesta, Ebrard aseguró que habría coexistencia con el gobierno, pero no complicidad.
"De parte del Gobierno de la ciudad cabe esperar la coexistencia con una realidad política y de poderes con la que no estamos de acuerdo. Habrá coexistencia, pero nunca habrá complicidad sobre el abuso que se ha cometido y las causas que lo hicieron posible"
Esto, porque López Obrador se había proclamado como presidente legítimo y ningún político de izquierda se atrevía a reconocer a Calderón como presidente.
Sin embargo, en 2012, cuando se inauguró la Línea 12 del Metro, ambos mandatarios dejaron de lado sus diferencias y hasta posaron para la foto.
Incluso, Ebrard agradeció las aportaciones del gobierno federal para la construcción de la llamada Línea Dorada, que más tarde sería su dolor de cabeza debido a las irregularidades reportadas.
4. ZAMBRANO Y AMLO
Durante las elecciones de 2012, Jesús Zambrano se paseaba junto con López Obrador para promover su candidatura presidencial, incluso sostenía que el tabasqueño ganaría por 10 puntos a Enrique Peña Nieto, quien entonces era el candidato del PRI y el PVEM.
Pero el amor por López Obrador terminó tras perder, otra vez, las elecciones y poco a poco comenzó el distanciamiento, a tal grado que en mayo de 2016, Jesús Zambrano declaró que su partido no iría "ni a la esquina" con el precandidato de Morena.
5. ELBA ESTHER Y PEÑA
En 2010, cuando Enrique Peña Nieto era gobernador del Estado de México, se le vio sonriente y se sentó junto a Elba Esther Gordillo, entonces dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), y fundadora del partido Nueva Alianza.
La buena relación entre ambos provocó que Nueva Alianza firmara una alianza con el PRI y el PVEM para que Peña Nieto fuera su candidato presidencial. El encargado de concretar dicha unión fue Humberto Moreira.
Sin embargo, los "problemas" comenzaron cuando el PRI anunció que rompía su alianza con el partido fundado por Gordillo porque no se alcanzaron los acuerdos suficientes para apoyar todas las candidaturas (senadurías, diputaciones federales y locales) por lo que ese año, Nueva Alianza lanzó a su propio candidato presidencial: Gabriel Quadri de la Torre.
Desde ese momento, la relación entre el presidente y la exlíder magisterial se volvió tensa e incluso conflictiva, pues en más de una ocasión, Gordillo se pronunció en contra de la reforma educativa propuesta por Enrique Peña Nieto.
6. MARGARITA ZAVALA Y RICARDO ANAYA
Cuando las aspiraciones presidenciales llegan, las amistades se alejan, bueno al menos eso fue lo que pasó con estos dos personajes de la política mexicana que durante muchos años llevaron una relación cordial.
Sin embargo, cuando Zavala anunció en junio de 2015 que buscaría llegar a Los Pinos. En agosto de ese año, Anaya asumió como líder del partido. Desde entonces, comenzó un estira y afloja entre ambos líderes panistas por definir el método para elegir a su abanderado en 2018.
Finalmente, Margarita decidió renunciar al PAN, pero quedarán las imágenes de los múltiples eventos en los que coincidió con Ricardo Anaya.
7. CUAUHTÉMOC BLANCO Y GRACO RAMÍREZ
El choque entre Graco Ramírez, quien ocupa el cargo de gobernador desde 2012, y Cuauhtémoc Blanco, quien se convirtió en alcalde de Cuernavaca en diciembre de 2015, ha ocurrido, principalmente, por tres temas: la implementación en el estado del modelo de mando único policial, un supuesto chantaje del gobernador Ramírez al alcalde Blanco y por el juicio político del congreso de Morelos contra el exfutbolista.
A finales de noviembre de 2016, el alcalde Cuernavaca Cuahtémoc Blanco anunció que su administración "rompía" con el gobierno estatal de Graco Ramírez, pues el exfutbolista acusó que el gobernador morelense buscaba chantajearlo para supuestamente realizar una concesión irregular del alumbrado público y del servicio de recolección de basura de la capital del estado.
Pero antes de dicha ruptura, Graco y Blanco posaron, en 2015, para la foto institucional en donde prometieron que habría cooperación para lograr acuerdos en beneficio de los ciudadanos.
8. RICARDO ANAYA Y ENRIQUE PEÑA NIETO
El 20 de diciembre de 2013, Ricardo Anaya, en su calidad de presidente de la Cámara de Diputados, estuvo presente en la promulgación de la Reforma Energética y aseguró que vendrían tiempos mejores con dicha legislación porque era modernizadora y el cambio es lo que "hace que el mundo avance".
En esa ocasión, Anaya se mostró contento, amable y hasta fue a darle un apretón de manos al presidente Enrique Peña Nieto.
Sin embargo, tres años después, en julio de 2016, Anaya aseguró que los aumentos en la gasolina y la electricidad se deben a que la reforma energética "llegó muy tarde".
Ya como precandidato presidencial, dijo que el primer mandatario le había fallado a todo el país por permitir dichos aumentos y mantener altos niveles de corrupción e inseguridad.