Delfina Gómez, nueva titular de la Secretaría de Educación Pública, ofreció su primer discurso como secretaria de Estado y aseguró que estar al frente de la SEP es un honor y la llena de orgullo.
"Lo asumo no como un cargo político burocrático, asumo esta representación como el encargo más hermoso que puede existir", dijo.
Destacó que es la primera vez, en 100 años, que el titular de la SEP tenga su origen en la educación básica.
La excandidata a gobernadora del Estado de México resaltó que a diferencia de muchos, ni solo estudió los problemas de la educación mexicana o leyó los diagnósticos o las recomendaciones de algunos especialistas en la materia, sino que ella los vivió, por lo que esa experiencia la legitima.
Gómez lamentó que en estos años, la secretaría perdió su alma y su esencia y que los docentes fueron testigos de abusos simulaciones, desvíos y negligencias, en suma de la corrupción.
La titular de la SEP dijo que si bien en estos dos años hubo logros en materia educativa y la administración del gasto, aún queda mucho por atender pues no se deben olvidar los abusos de la época neoliberal sobre el sistema educativo nacional, cómo se estigmatizó el trabajo del docente y la poca a atención a las mínimas solicitudes del magisterio.