Porque estos movimientos podrían prender las alarmas para las autoridades y los habitantes de México
Las entidades de Morelos, Puebla y la Ciudad de México fueron testigo de un nuevo sismo registrado este 19 de septiembre y cuya magnitud, según datos del Sismológico Nacional fue de 7.1 en la escala de richter. Hasta el momento se reportan 58 muertos, y ojo, porque luego de un gran temblor, siempre vienen las réplicas.
¿Qué son, por qué pasan y, lo más importante, debemos preocuparnos por ellas? Te dejamos todo lo que tienes que saber de las posibles réplicas del sismo.
Las réplicas de un sismo son casi inherentes a estos fenómenos, de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional (SSN).
"Cuando ocurre un sismo de magnitud considerable, como el de este jueves, las rocas que se encuentran cerca de la zona de ruptura sufren un reacomodo, lo que genera una serie de temblores en la zona que reciben el nombre de réplicas"
El número de las réplicas puede variar desde unos cuantos hasta cientos de eventos en los próximos días o semanas de ocurrido el temblor principal (el de este jueves), agregó el SSN.
Sin embargo, el sismo que se sintió este 19 de septiembre, ha tenido hasta ahora 11 réplicas casi imperceptibles, esto se debe a que el sismo tuvo una profundidad de 57 kilómetros y a mayor profundidad, es menos probable que ocurran este tipo de fenómenos, explicó Carlos Gutiérrez, titular del Cenapred.
México se encuentra en una zona de alta sismicidad debido a la interacción de cinco placas tectónicas: La placa de Norteamérica, la de Cocos, la del Pacífico, la de Rivera y la placa del Caribe.
Por esta razón no es rara la ocurrencia de sismos. El SSN reporta en promedio la ocurrencia de 15 sismos por día de magnitud 2.
Chiapas es uno de los estados con mayor sismicidad en la República Mexicana. El origen de esta sismicidad se debe al contacto convergente entre dos importantes placastectónicas: La placa de Cocos y la Placa del Caribe.