Urge un cambio de chip para combatir la corrupción
Parece que los mexicanos están resignados a vivir con la corrupción a todos niveles, incluso a destinar parte de su salario en ella.
María Amparo Casar, presidenta de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, explicó que los mexicanos están dispuestos a destinar un porcentaje de sus ingresos en pequeños actos de corrupción.
"La corrupción en los hogares es un impuesto regresivo. Encontramos que ellos gastan el 14% de sus ingresos en pequeños actos de corrupción que permiten vivir o facilitarse a la vida. Si me voy a los hogares en los que se recibe un salario mínimo, 33% del ingreso anual se destina a pequeños pagos de corrupción. Por eso llamamos que es un impuesto regresivo"
En corrupción, México ocupa el lugar 95 de 168 países, según Transparencia Internacional; el 153 de 159, de acuerdo con el Banco Mundial; el 34 de 34, para la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, y para los mexicanos no hay mucha diferencia: 79 por ciento piensa que la corrupción es un problema serio, según el estudio Anatomía de la Corrupción.
La organización presentó la segunda edición del estudio, lanzado en 2015, con la actualización de datos sobre los índices de corrupción en el país y la integración de un apartado dedicado al Sistema Nacional Anticorrupción.
Además de demostrar que la corrupción está presente en todos los sectores del país, el estudio ofrece una fotografía sobre las actitudes y percepciones de los ciudadanos que aceptan haber incurrido en actos de corrupción y se muestran ambiguos sobre temas como la piratería y el respeto a las leyes que consideran injustas.
Existe una crisis de representación en México, ya que cada vez los ciudadanos creen menos en los partidos políticos; sin embargo “la corrupción no se circunscribe al sector público, atraviesa clases sociales, sectores económicos, industrias. Creo que nos tenemos que cambiar el chip en el combate a la corrupción”, dijo Casar.
La investigadora explicó que de acuerdo con el Banco Mundial, el 9% del Producto Interno Bruto es lo que se destina a corrupción, y según el Foro Económico Mundial el porcentaje es menor, sólo un 2%.
Aquí puedes revisar el estudio completo.