Porque el 90% de los pacientes fallece en los siguientes 10 meses después del diagnóstico
El cáncer representa una de las primeras causas de muerte a nivel mundial, pues en 2012 se le atribuyeron 8.2 millones de decesos, de acuerdo con la cifra más reciente de la Organización Mundial de la Salud.
Sin embargo, de los más de 100 tipos que existen de esta enfermedad, solo uno es el que acapara el mayor número de muertes sin importar el género ni la edad: hablamos del cáncer de pulmón.
En México, el número de muertes por cáncer de pulmón supera al de hígado, mama o próstata con un total de 6 mil 407 decesos en el 2013, según datos de la Secretaría de Salud. Cada año, 10 mil personas son diagnosticadas con esta enfermedad en el país.
Y a nivel mundial la tendencia no cambia. Tan solo el cáncer de pulmón genera más muertes (un millón 590 mil) que el de próstata (307 mil), colorrectal (694 mil) y mama (522 mil) juntos.
Pero estas cifras no son las únicas que preocupan, pues la detección oportuna también es un factor clave que lamentablemente tampoco ocurre en el país, pues el cáncer de pulmón solo se diagnostica en 0.6% de los casos de manera temprana; en etapa localmente avanzada es de 24% y cerca del 65% lo detecta cuando ya se encuentra en un periodo crítico, dice la Secretaría de Salud. Estos datos son preocupantes, pues el porcentaje de supervivencia del cáncer de pulmón depende en su mayoría de la etapa en que se detecta la enfermedad.
Por ejemplo, si una persona recibe un diagnóstico temprano de cáncer de pulmón tiene una probabilidad de supervivencia del 54%; si se detecta un tumor avanzado pero solo en área local el porcentaje disminuye a 26%, mientras que si se detecta en una etapa avanzada (metástasis) cae hasta el 4%.
Lamentablemente esto provoca que el 90% de los pacientes que han sido detectados con cáncer de pulmón fallezcan en los siguientes 10 meses después del diagnóstico.
PREOCUPACIÓN NORTEÑA
En México, la incidencia y mortalidad por cáncer de pulmón, calculadas en el año 2012, fueron 7.5 y 6.7 casos por cada 100 mil habitantes, respectivamente.
Sin embargo, la mayoría de estos casos registrados se da en los estados del norte del país: Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Nayarit, Nuevo León, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas.
De estos estados, las cifras más altas de muertes por cáncer de pulmón se dieron en Sonora, con 11.1 decesos por cada 100 mil habitantes, y Sinaloa, con una tasa de 9.6.
"En América Latina y México son diversos los factores que contribuyen al desarrollo de esta enfermedad, principalmente, el tabaquismo, la tuberculosis, la contaminación ambiental y la exposición al humo de leña y a minerales como el asbesto, indica la Secretaría de Salud.
¿CÓMO DETECTARLO?
Recuerda que el cáncer se da por el crecimiento descontrolado de las células al alterarse los mecanismos de división y muerte celular, lo que genera el desarrollo de tumores o masas anormales en cualquier parte del cuerpo.
Como muchos otros tipos, la mayoría de los cánceres de pulmón no causan ningún síntoma hasta que la enfermedad se ha propagado demasiado. Sin embargo, las señales más comunes pueden ser:
-Tos que no desaparece o que empeora.
-Dolor en el pecho que a menudo empeora cuando respira profundamente, tose o se ríe.
-Ronquera.
-Pérdida de peso y pérdida de apetito.
-Tos con sangre o esputo (saliva o flema) del color del metal oxidado.
-Dificultad respiratoria.
-Cansancio o debilidad.
-Infecciones como bronquitis y neumonía que no desaparecen o que son recurrentes.
-Nuevo silbido de pecho.
Por supuesto, la mejor forma de prevenir el cáncer de pulmón es evitar los factores de riesgo como el tabaco, el cuál es el más importante de ellos. Además, llevar una dieta balanceada (frutas, verduras), hacer ejercicio y acudir al médico de manera frecuente.