Porque esta es una muestra de la impunidad de la que gozaba el Chapo
Entre finales de los años 80 e inicios de los 90, Joaquín el Chapo Guzmán lograba ingresar ilegalmente a México hasta 20 millones de dólares mensuales, producto de la venta de cocaína y marihuana en los Estados Unidos, según reveló durante su juicio en Estados Unidos un exsubordinado suyo: Miguel Ángel Martínez, alias el Gordo o el Tololoche.
Este martes, Miguel Martínez, quien está en libertad por un acuerdo de cooperación con las autoridades estadoundienses, dijo que a inicios de los años 90 Joaquín Guzmán tenía a su disposición cuatro aeronaves, con las cuales realizó viajes de negocios y placer a "toda Europa", Japón, Brasil, Perú, Cuba, Hong Kong y Macau.
Martínez aseguró que el exlíder del Cártel de Sinaloa viajó a Macau "para apostar", según Keegan Hamilton, un periodista del New York Times que estuvo presente durante el testimonio que el Gordo brindó contra el Chapo.
Además, Martínez dijo recordar que hace tres décadas Guzmán Loera compró una casa en Acapulco, Guerrero, por 10 millones de dólares, la cual incluía un yate al cual nombró Chapito.
Otra compra que realizó el narcotraficante fue la de un rancho en Jalisco, el cual tenía un zoológico privado con tigres, leones y panteras, y que por su tamaño, contaba con un tren interno para desplazar a los visitantes, según este testigo, cuyo rostro no puede ser difundido ni en los bosquejos del juicio.
El Gordo también declaró ante la corte que, por órdenes del Chapo, el Cártel de Sinaloa importó ilegalmente a Estados Unidos, entre 1987 y 1993, de 25 a 30 toneladas de drogas al año, a través de un túnel ubicado en Agua Prieta, Sonora, lo que generó ingresos por alrededor de 500 millones, de los cuales el 45% eran para Guzmán Loera.
Miguel Ángel Martínez dijo que él personalmente estuvo a cargo de importar a Estados Unidos “más de 150 toneladas” de cocaína, porque “el señor Guzmán me lo indicó”, según el testimonio que brindó ante la corte.
Con información de Notimex