El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, nombró al senador Marco Rubio como su opción para secretario de Estado, cargo que lo convertirá en el primer hispano en alcanzar el puesto de mayor rango en la historia de ese país.
¿Quién es Marco Rubio? Actualmente cuenta con 53 años, nació en Miami y todavía considera a esa ciudad su hogar. Su padre era camarero y su madre camarera de hotel. En su primera campaña para el Senado, recordó repetidamente a los votantes su origen de clase trabajadora y su historia de “sólo en Estados Unidos” como hijo de inmigrantes cubanos que llegó a ser senador de Estados Unidos.
Es católico, pero pasó unos seis años de su infancia en Las Vegas, donde fue bautizado en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y asistió a los servicios mormones. La familia se mudó a la ciudad cuando Rubio tenía ocho años y sus padres encontraron trabajo en la creciente industria hotelera.
Rubio jugó fUtbol universitario y se casó con una animadora profesional. Es un gran aficionado al futbol americano que soñaba con llegar a la NFL cuando jugaba en la escuela secundaria, pero solo recibió ofertas sólidas de dos universidades. Se graduó de la Universidad de Florida y de la Facultad de Derecho de la Universidad de Miami.
Se comprometió con Jeanette Dousdebes, y ella hizo una prueba y logró entrar al equipo de animadoras de los Miami Dolphins. Se casaron en 1998 y tienen cuatro hijos.
Estuvo a punto de convertirse en fiscal general de Florida. En 2010, fue un candidato con pocas posibilidades de ganar la nominación republicana al Senado frente al entonces gobernador Charlie Crist. Los líderes del partido lo presionaron para que abandonara la carrera senatorial y se postulara para fiscal general, con promesas del partido de despejarle el camino. “Casi me había convencido a mí mismo de abandonar” la carrera senatorial, escribió en sus memorias, “Un hijo americano”.
Rubio entró en la carrera presidencial de 2016, enfrentándose a un campo republicano repleto que incluía a Trump. Rubio ganó en Minnesota, donde el senador de Texas, Ted Cruz, terminó en segundo lugar y Trump en tercer lugar. Sus únicas otras victorias fueron en Washington, DC, y Puerto Rico.
Abandonó la carrera después de que Trump lo derrotara en su estado natal. Trump se llevó Florida con el 45,7% de los votos, mientras que Rubio quedó en un distante segundo lugar con el 27%.
ºRubio y Trump intercambiaron golpes verbales durante la contienda, y Trump llamó a Rubio “el pequeño Marco”. Rubio respondió insultando el tamaño de las manos de Trump y llamándolo “estafador” y “vulgar”.
Su relación mejoró cuando Trump llegó a la Casa Blanca. Cuando ABC News reprodujo a principios de este año algunos de los comentarios de Rubio de 2016, les restó importancia diciendo que "fue una campaña".
A menudo habla de amenazas extranjeras, especialmente de China. Rubio se subió a la ola del Tea Party en 2010 para alcanzar prominencia nacional. En su campaña, afirmó que el entonces presidente Barack Obama y el Congreso controlado por los demócratas amenazaban la economía del país al apoyar políticas desastrosas de gasto interno, impuestos y atención médica.
Como vicepresidente del Comité Selecto de Inteligencia del Senado y miembro del Comité de Relaciones Exteriores, Rubio ahora analiza con frecuencia las amenazas militares y económicas extranjeras, en particular las de China. Advierte que China, Irán, Corea del Norte y Rusia están colaborando cada vez más contra Estados Unidos.
“Todos comparten un mismo objetivo: quieren debilitar a Estados Unidos, debilitar nuestras alianzas, debilitar nuestra posición, nuestra capacidad y nuestra voluntad”, dijo en un discurso en marzo pasado.