Tras la muerte de Tyre Nichols, un hombre afrodescendiente de 29 años, cinco policías de Estados Unidos fueron acusados y encarcelados. El joven falleció tras ser arrestado por una infracción de tránsito
Los agentes pertenecen a la ciudad de Memphis, Tenessee, y fueron inculpados por homicidio, golpes y lesiones, así como el secuestro de Tyre Nichols el pasado 7 de enero, según el registro de la cárcel del condado de Shelby.
Nichols, quien murió tres días después de ser hospitalizado, presentó dificultades para respirar durante sus últimos días.
Por su parte, el Departamento de Policía informó que la "confrontación tuvo lugar" y "el sospechoso huyó" durante el arresto.
Los cinco elementos inculpados fueron despedidos la semana pasada debido a que la investigación interna de la policía demostró que usaron fuerza excesiva.
Según los abogados de la familia de Nichols, "la policía lo golpeó al punto en que no era reconocible".
El presidente Joe Biden envió sus condolencias a la familia de un joven afroamericano e hizo un llamado a que las eventuales protestas por lo sucedido eviten la violencia.
"La violencia es destructiva y contraria a la ley. No tiene cabida en protestas pacíficas en busca de justicia", apuntó en un comunicado de la Casa Blanca.